Han tardado en hacerlo, pero al fin regresan. Las grúas vuelven a los cielos de la ciudad tras bastante tiempo sin verlas a consecuencia del desplome inmobiliario. Aún son pocas comparadas con las que se multiplicaban en los años previos a la crisis, pero su tenue aparición sirve para aportar esperanza a uno de los sectores que han tocado fondo durante los ejercicios pasados.

Los distritos Casco Antiguo, Nervión, Triana y Sevilla Este son los que más se están beneficiando del repunte. En esta última demarcación territorial se autorizó en 2015 una promoción de 161 viviendas en la calle Profesor Manuel Olivencia. También en Ramón y Cajal, en Nervión, la Gerencia de Urbanismo otorgó los permisos necesarios para edificar un conjunto de viviendas, así como una serie de oficinas y locales de planta baja. Otra zona en la que se percibe cierto movimiento inmobiliario es el entorno de la Macarena, así como Triana, con varias licencias concedidas para construir nuevos inmuebles de uso residencial en las calles Ángel Solans, Avenida de Coria, Alfarería y Castilla.

El gerente de la patronal de constructores y promotores inmobiliarios de Sevilla (Gaesco), Juan Aguilera, atribuye este repunte a la fluidez de la financiación bancaria, una posibilidad que antes estaba cercenada. Prueba de este nuevo crecimiento son las licencias otorgadas por la Gerencia de Urbanismo en los primeros nueve meses de 2015, cuando se concedieron permisos para edificar 427 viviendas, cifra impensable años atrás.

Esta mejoría es extensiva a toda Andalucía, donde la compraventa de viviendas aumentó un 10,6% el pasado ejercicio, lo que supone la mayor subida de esta actividad desde 2007. En 2015 se contabilizaron en la comunidad autónoma 70.739 operaciones sobre inmuebles residenciales, es decir, 1.074 más que en 2014. El incremento se debió al tirón de los pisos de segunda mano, que registró su mejor cifra desde 2008. Se adquirieron 54.142 viviendas usadas, un 41% más que el año anterior.

Sirva de ejemplo en este punto el caso de Sevilla. En esta provincia 11.536 viviendas fueron objeto de venta en 2015. De ellas, 9.801 eran de segunda mano, lo que supone el 85% de las operaciones. La cifra de pisos en general que se adquirieron supone un incremento del 5,35% respecto a 2014, aunque aún queda bastante lejos de la alcanzada en los años previos a la crisis, cuando en 2007 se llegó a las 32.610.

El presidente del Instituto de Prácticas Empresariales (IPE), José Antonio Pérez, se muestra optimista sobre el aumento de las ventas y del precio durante el presente ejercicio. Según Pérez, este año acabará con una subida del 10% tanto en las operaciones inmobiliarias como en el coste de las viviendas, un aumento que permitirá a la provincia situarse en la media nacional y regional, de la que actualmente se encuentra por debajo.

Otro aspecto importante es la venta de inmuebles para usos terciarios, que se está manteniendo a flote gracias a que los precios aún son bajos. La previsión es que los costes del alquiler de locales y oficinas vayan al alza durante 2016.