La Policía Nacional detuvo ayer a José Luis Chico Gálvez, hermano mayor del Calvario, como presunto autor de un intento de extorsión y de un delito de amenazas graves. El responsable de la cofradía de la Madrugada ha pasado la noche en los calabozos de la Jefatura Superior de Policía, en la avenida de Blas Infante, y ha quedado en libertad con cargos después de haber sido puesto a disposición judicial a primera hora de la mañana de este jueves. En su declaración ante la Policía admitió la autoría de los hechos.

Según han explicado a este periódico fuentes de la investigación, Chico podría haberse aprovechado de su cargo como hermano mayor para hacerse con datos de personas a las que intentó extorsionar. Hay al menos dos afectados que han presentado denuncias contra él. Ambos denunciantes son hermanos del Calvario y éste es precisamente el único aspecto que une a las dos víctimas, por lo que la Policía cree que el detenido obtuvo información de ellas a través de la hermandad.

El hermano mayor podría haber pedido dinero a estas dos personas a cambio de no hacerle daño a su familia. Los dos afectados no llegaron a pagar y pusieron los hechos en conocimiento de la Policía Nacional hace unos meses. Tras varios interrogatorios, los agentes encargados de la investigación –pertenecientes al Grupo de Atracos- descubrieron que el único hilo que unía a las dos víctimas era la pertenencia a una misma cofradía. A raíz de ahí las sospechas se centraron sobre el hermano mayor, que fue detenido a las diez de la mañana del pasado miércoles.

El hermano mayor del Calvario es un empresario dedicado al sector cárnico y de la alimentación que todavía no lleva un año al frente de la cofradía de la Magdalena. En junio de 2008 tomó posesión de su cargo, por lo que ésta sería su primera Semana Santa en la que procesionaría con la vara dorada. Este miércoles esgrimió motivos de salud para ausentarse de una reunión de hermanos mayores.