Poder ahorrar dinero y disfrutar de una salud financiera óptima es, probablemente, el deseo principal de cualquier persona adulta. Poder tener una estabilidad económica que nos aporte libertad y tranquilidad es un factor esencial para poder vivir una vida estable y sin sobresaltos en cuestiones financieras. 

No obstante, hoy en día, debido en gran parte a la inestabilidad económica general y, en concreto, a la enorme precariedad que existe en ciertos sectores laborales, la preocupación por mejorar la salud financiera se ha posicionado como una de las principales inquietudes de la población adulta.

Además, también existen muchas dudas acerca de cómo se puede ahorrar más dinero cada mes para contar con un colchón económico de respaldo que nos ayude, por ejemplo, a hacer frente a un gasto extra o a permitirnos comprar algún producto que necesitemos.

Por todo esto, en el día de hoy nos hemos propuesto redactar una serie de 7 métodos infalibles que nos expertos en finanzas recomiendan para ahorrar dinero y mejorar la salud financiera de cualquier persona. 

Mantener las deudas bajo control

Uno de los principales factores que empeoran la salud financiera de una persona y le impide ahorrar son las deudas: hipotecas, créditos personales, adelantos… Todos estos productos financieros se vuelven algo complicados, sobre todo, cuando llega un momento en el que no podemos hacer frente a los pagos. 

Por suerte, hoy en día existen soluciones que te pueden ayudar, no solo a mantener las deudas bajo control, si no también a salir de listados de embargos como ASNEF, RAI o CIRBE. 

Si lo que necesitas es salir de ASNEF Equifax, gracias a empresas como Asnef.online, hoy en día puedes acceder a herramientas y soluciones únicas que te permitirán, no solo saber si estás incluído en una lista de deudores, si no también si esa inclusión es indebida y te corresponde una indemnización por parte de la compañía. 

Ahorrar redondeando las compras

Uno de los métodos más fáciles para ahorrar dinero es redondear las compras que realizamos. Tanto si las hacemos con dinero en efectivo como si hacemos los pagos mediante tarjeta, redondear las compras al alza es un recurso sencillo y con el que ni siquiera nos daremos cuenta de que estamos ahorrando. 

Así, si por ejemplo vamos al supermercado y gastamos 18 euros, podemos redondear la compra a 20 euros y guardar los dos euros restantes como ahorro. Además, hoy en día muchos bancos también permiten programar esta acción a través de los pagos con tarjeta, enviando el redondeo directamente a una cuenta de ahorro. 

Comprar de segunda mano

Otra de las alternativas que mejor funcionan para ahorrar dinero cada mes es comprar productos y artículos de segunda mano: ropa, zapatos, accesorios, objetos de decoración o incluso ordenadores de segunda mano. Actualmente, como consumidor, puedes disfrutar de todo tipo de productos reacondicionados, como en el caso de LotesPC.es, una empresa especializada en la venta de equipos informáticos de segunda mano con garantía y que te permitirá acceder a ordenadores mucho más económicos y que cumplen perfectamente su función. 

De esta manera, se puede ahorrar muchísimo dinero disfrutando de productos de calidad, propiciando además la reducción del consumo, comprando productos que ya estaban fabricados y en los que no hay que invertir nuevos recursos sin renunciar a la calidad. 

Planifica a medio y largo plazo

Un error que  muchas personas cometen a la hora de establecer una rutina que les permita gozar de una buena salud económica es no planificar sus ingresos, gastos y objetivos financieros. La planificación resulta un pilar fundamental para cualquier tipo de economía, ya que permite dividir los gastos, pensar estratégicamente en el futuro e implantar rutinas de ahorro que te permitan cumplir con las metas que te hayas propuesto. 

Así tus metas sean ahorrar dinero para tener un respaldo, para pagar la entrada de una hipoteca o un vehículo o para hacer un viaje, planificar cuánto ingresamos y cuánto dinero queremos ahorrar puede ser el primer paso a cumplir para conseguir una estabilidad y una comodidad financiera. 

Crea partidas para tu sueldo a principio de mes

Una de las mejores fórmulas que tenemos para ahorrar y cuidar de nuestra salud financiera es dividir el sueldo al inicio del mes, creando partidas para cada tipo de gasto que podamos programar. Así, además de dividir los gastos más obvios como puede ser el pago del alquiler o la hipoteca o las facturas de suministros como el agua, la luz o el servicio de Internet, también debemos intentar crear partidas más específicas aunque no sepamos exactamente cuánto dinero gastaremos en el mes. 

Se pueden crear partidas concretas para compras de alimentación, para otros gastos como una suscripción mensual al gimnasio o a una plataforma de contenidos audiovisuales o, simplemente, separar cierto presupuesto para dedicarlo exclusivamente al ocio. Así, podrás tener una previsión de gastos bastante ajustada y, a partir de ahí, ahorrar todo el dinero que sobre. 

Establece un mínimo de ahorro por mes

Otra fórmula que funciona muy bien  y que, además, se puede adaptar perfectamente a todo tipo de planes y presupuestos es establecer una cantidad mínima de ahorro al mes. Esta cantidad, que puede ir desde 10 euros hasta 200 o la cantidad de dinero que cada uno se pueda permitir, ayuda muchísimo a ir recaudando nuestro propio dinero sin muchas complicaciones. 

Lo bueno de este método es que, sea la cantidad que sea, cuando hayan pasado unos meses habrás conseguido ahorrar seguro cierta cantidad de dinero. En este sentido, para aplicar este método, lo mejor es ser realista y establecer una cantidad que te resulte cómoda, para que sea más sencillo ahorrar. 

Elimina gastos secundarios

Finalmente, el último de los consejos para ahorrar dinero y tener una mejor salud financiera es realizar una especie de “auditoría” propia en la que analices qué gastos tienes cada mes y renuncies a aquellos que sean secundarios: eliminar una subscripción que ya no utilizas, cocinar más en casa y salir menos a comer fuera o evitar comprar productos a los que vas a dar poco  uso. 

Además, también puedes hacer una recolección de objetos que ya no utilices, venderlos a través de internet y dedicar ese dinero extra a tu cuenta de ahorro.