Muere Carlos Shaw García, hijo del fundador de la joyería de la Plaza Nueva en Sevilla

Adiós a uno de los nombres propios en la joyería sevillana. Carlos Shaw García, hijo del fundador de la Joyería Shaw (en la Plaza Nueva de Sevilla), ha fallecido este martes. Se trata de la segunda generación que se puso al frente de este céntrico establecimiento, cuya gestión está en manos desde hace años de sus hijos, Carlos y Silvia Shaw Navarrete.

Carlos Shaw supo llevar las riendas de un negocio que había fundado en 1940 su padre, Antonio Shaw, al abrir un taller en la Palmera, donde hoy se encuentra una sucursal de la Clínica de Fátima. Allí empezó a interesarse por el diseño, motivo que lo llevó a viajar a París. En 1959 trasladó el negocio a la Plaza Nueva. Desde su apertura se hizo con una distinguida clientela de la ciudad que ha mantenido durante décadas. A tal fama llegó, que abrió también un establecimiento en Madrid, el cual mantuvo su actividad en los años 70 y 80 en el Hotel Villamagna.

Los diamantes, rubíes y piedras preciosas son una constante en sus joyas. Las pulseras, anillos, collares y pendientes siguen teniendo un gran reclamo. Sin olvidar la importante gama de relojes.

La segunda generación

Después del fundador, Carlos Shaw García, junto a su hermano Antonio, se hizo con este negocio, para el que tuvo la capacidad de seguir potenciando la línea de exclusividad iniciada por su padre y que supo transmitir a sus hijos. Y ello pese a las grandes transformaciones que sufrió en aquellas décadas el comercio sevillano, donde habían empezado a entrar con fuerza las franquicias.

Ejemplo de ello es el lugar donde siempre ha estado esta joyería, la Plaza Nueva, que a principios del siglo XXI -en una época de auge económico- se quiso convertir en la milla de oro del comercio hispalense. Pocas, muy pocas, de las firmas de alto lujo que aterrizaron en la zona se mantienen hoy día. En el enclave, de hecho, gana peso los últimos años el sector hostelero. No fue fácil resistir el cambio de tendencia.

Su hijo, Carlos Shaw Navarrete, destaca el interés que siempre mostró por la gemología, especialmente a la hora de clasificar e identificar las piedras y diamantes, tarea en la que se convirtió "en un gran especialista". De hecho, fue alumno de la primera promoción del Instituto Gemológico de España (IGE), con sede en Madrid.

Aunque desde niño estuvo aprendiendo de su padre el trabajo de la joyería y la gestión de la tienda, en 1993 se convirtió, junto a su hermano Antonio, en dueño del negocio, responsabilidad que abandonó 2015, cuando una enfermedad lo retiró de la vida laboral.

El legado

Carlos Shaw García supo transmitir la profesionalidad y el amor por el oficio a sus hijos Carlos y Silvia, que empezaron a participar en la dirección de la joyería en 2009, en plena crisis económica. En este tiempo el emblemático establecimiento ha sido protagonista de uno de los robos "maestros" realizados en Sevilla (en la madrugada del 1 de enero de 2015) y de un traslado, aunque sin abandonar la zona. Debido al cambio de uso del edificio donde abrieron en 1959 (para adaptarlo a hotel), tuvieron que trasladarse a la esquina de la Plaza Nueva con Méndez Núñez. Un local donde aparecieron restos del antiguo Convento de San Francisco y que esta firma joyera ha sabido conservar y respetar hasta convertirlo en uno de los símbolos de su exlcusiva tienda.

El Grupo Mémora informa de que el tanatorio de la SE-30 acoge este martes el velatorio de Carlos Shaw García. Mañana miércoles, a las 9:20, tendrá lugar el oficio religioso en la capilla del tanatorio para después, a las 11:00, proceder a su inhumación en el Cementerio de San Fernando.