Los muestreos de mosquitos empezarán el próximo marzo para evitar otra crisis por virus del Nilo
salud
La Estación Biológica de Doñana mantendrá la vigilancia intensiva de mosquitos hasta finales de noviembre
Salud notifica una nueva muerte por virus del Nilo en Sevilla
"Podríamos tener la primera vacuna del virus del Nilo entre los próximos tres o seis años"
Los muestreos de mosquitos de la Estación Biológica de Doñana (EBD) para controlar poblaciones que propaguen el virus del Nilo comenzarán a mediados del próximo marzo, centrados en los municipios sevillanos de Coria del Río, La Puebla del Río y Palomares del Río, para evitar una nueva crisis por el virus del Nilo Occidental. La Junta, por su parte, tiene previsto empezar a actuar a principios de junio.
Así lo han indicado a EFE fuentes de la EBD, que han señalado que la vigilancia intensiva de estos insectos se mantendrá hasta finales de noviembre, para posteriormente estudiar la "invernada", antes de que en primavera se retomen los análisis semanales. Igualmente indican que entre noviembre y la próxima primavera "se seguirá trabajando pero a menor intensidad para estudiar la invernada de los mosquitos".
Durante el invierno, aunque los mosquitos siguen presentes, huyen del frío "refugiándose en agujeros o sótanos", de modo que no son tan apreciables como cuando llegan los meses de calor, aunque estudiarlos en épocas de frío tiene mucho valor para los investigadores.
La EBD señala que se analizan unos 1.000 puntos distintos de Huelva, Sevilla y Cádiz con el proyecto Arboprevent, un trabajo intenso de control del virus del Nilo Occidental (VNO) para trazar un mapa exacto de la ubicación de mosquitos transmisores y "predecir" el contagio en humanos.
Este trabajo está financiando con casi medio millón de euros por la Fundación La Caixa y lo desarrolla la Estación Biológica de Doñana, con la previsión de que termine a finales de 2025.
Arboprevent cuenta con puntos fijos de muestreo en las localidades sevillanas de La Puebla del Río, Coria del Río y Palomares del Río, además de centenares de localizaciones en las tres provincias donde se trabaja.
El objetivo es crear "un mapa de distribución y abundancia de mosquitos, y conseguir herramientas de alarma temprana de proliferación y riesgo de transmisión de virus".
Para que los expertos trabajasen se diseñó "una matriz con cuadrículas de cinco kilómetros cuadrados", con puntos de control en las intersecciones de esas cuadrículas, donde durante todo 2023 y 2024 se están seleccionado muestras de mosquitos para analizar, con el objetivo final de realizar el muestreo definitivo durante 2025.
Con todo ello, se quieren identificar las áreas de riesgo de transmisión del virus en Andalucía, donde está circulando con mayor intensidad, y proponer estrategias de control para reducir la abundancia de mosquitos en las zonas habitadas.
También te puede interesar