Una multitud increpó ayer a unos sanitarios en Los Pajaritos, cuando se disponían a atender a una persona que finalmente falleció. Se trata de un hombre que había muerto en la calle Mirlo, aparentemente de forma natural y sin signos de violencia.

Los vecinos llamaron a los servicios sanitarios, pero consideraron que éstos tardaron demasiado y la arremetieron contra ellos cuando llegaron. Hubo insultos y acusaciones por la supuesta tardanza.

La ambulancia iba en ese momento sin protección de la Policía, por lo que se vivieron momentos de tensión y la Policía tuvo que acudir inmediatamente para controlar la situación. 

Los hechos ocurrieron pasadas las cuatro de la tarde de ayer. La comisión judicial se desplazó al lugar para decretar el levantamiento del cadáver. Un furgón de los servicios funerarios se llevó el cuerpo al Instituto de Medicina Legal, donde se practicará la autopsia.