El número de menores tratados por adicción a las drogas cae un 25% en Sevilla

La sustancia con más adictos entre edades tempranas es el cannabis, mientras que entre los adultos destaca la cocaína

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Dos toxicómanos consumen drogas en una calle del Polígono Norte.
Dos toxicómanos consumen drogas en una calle del Polígono Norte. / Juan Carlos Muñoz

El número de menores de edad admitidos a tratamiento por adicción a las drogas bajó un 27,5% en la provincia de Sevilla en el año 2024 en relación con el ejercicio anterior. Así consta en el informe anual de la Junta sobre esta materia, que explica que fueron 79 las personas menores de 18 años atendidas por los centros especializados. El año anterior fueron 109. De los 79 casos de 2024, 53 fueron hombres y 26 mujeres. La gran mayoría de ellos presentaba adicción al cannabis.

Esta sustancia es la que presenta una edad más baja, una media de 16,1 años, a la hora de iniciarse en su consumo. Le sigue el alcohol, a los 16,3 años. El inicio del consumo de cocaína se sitúa en los 21,4 años y el de la heroína y/o rebujao (mezcla de heroína y cocaína) en los 23,3 años. Las personas que inician sus tratamientos por juego patológico suelen empezar a los 24,4 años, mientras que el resto de adicciones sin sustancia está en los 24,8 años. El consumo de hipnosedantes se da a edades más elevadas, como los 29,7 años. Según el sexo, la edad media de inicio en el consumo es más elevada en las mujeres, principalmente en las adicciones comportamentales distintas al juego. En el caso del MDMA, la media de edad de inicio de las mujeres (19,9) es ligeramente menor que la de los hombres (22,3).

En Sevilla fueron 3.779 las personas admitidas a tratamiento a lo largo de 2024. De ellas, la gran mayoría fueron hombres (3.163) y sólo hubo 616 mujeres. Es un dato inferior al de años anteriores y uno de los más bajos de toda la secuencia histórica de la última década. Sólo los años 2020 y 2021, con 3.414 y 3.758 casos respectivamente, tuvieron menos ingresos que 2024. Y hay que tener en cuenta el contexto de estos dos años, con la pandemia del covid-19. En relación con el año 2023, cuando hubo 4.006 admisiones, la caída es del 5,6%.

En Andalucía , el número asciende a 18.533 admisiones, 638 menos que en 2023. A pesar de la disminución del número de personas admitidas a tratamiento para casi todas las sustancias, se mantienen estables los porcentajes según la sustancia principal registrada. Los cambios más significativos están en los porcentajes de cocaína (aumenta un 2,5% respecto a 2023) y al contrario el tabaco, que disminuye un 1,4% respecto al año anterior. El porcentaje de mujeres admitidas (19%) es muy inferior al de hombres y similar al de 2023.

Las mujeres admitidas por consumo de hipnosedantes suponen un 47.9%, por adicciones comportamentales distintas al juego patológico (compras, sexo, trabajo, etcétera) un 36,6% y por alcohol un 24%. El porcentaje más reducido lo representa el juego patológico (5,1%). La cocaína es la sustancia por la que más personas fueron admitidas a tratamiento el año pasado (33,2%), suponiendo el 35,2% del total de los hombres y del 24,6% de las mujeres. Le siguen las personas admitidas por alcohol (27,4%), cannabis (13,9%) y heroína y/o rebujao (11,9%). El juego patológico representa el 5,3% y el tabaco el 2,5%.

En cuanto a la población penitenciaria, hubo 712 admisiones, lo que representa el 3,8% del total. Son 154 más que el año anterior. De los 712 casos, 63 son mujeres. El 43% de los asuntos fueron por adicción a la cocaína y el 32,3% por heroína. Son porcentajes muy similares al año anterior, algo por encima en el caso de la heroína. En ambos casos, los porcentajes son superiores a los que representan estas sustancias para el total de las personas admitidas a tratamiento en Andalucía, que son del 33,2% para la cocaína y del 11,9% para la heroína.

Los menores tratados fueron 398, lo que supone el 2,1% del total. Fueron 136 menos que el año anterior. El cannabis es la sustancia por las que más menores de edad son admitidas a tratamiento (79,4%), seguida de las adicciones comportamentales, con un 6%.

Los extranjeros suponen un 9% de los admitidos. Son 77% más que en 2023. Los hombres representan un 76,9% y las mujeres un 23,1%, un porcentaje superior al 19% del total de las mujeres admitidas a tratamiento. Según la sustancia o adicción comportamental, el 34,2% fueron personas admitidas por alcohol (hasta el 48,1% de las mujeres extranjeras), 25,3% por cocaína, 19% por cannabis, 8,6% por heroína, 3,5% por juego patológico, 2,6% por otros opioides y el 1,7% por tabaco.

Las medidas de edad más elevadas las presentan las personas admitidas a tratamiento por alcohol (48 años), heroína (47,4) e hipnóticos y sedantes (45,2). Por el contrario, las admitidas por consumo abusivo o dependencia al MDMA y al cannabis presentan las medias de edad más bajas (29,3 y 30,2 años respectivamente). En función del sexo, la diferencia más significativa se encuentra en los adictos al MDMA, donde las mujeres tienen una media de edad de 8,6 años más que los hombres.

Independientemente del tipo de sustancia consumida, el desempleo es la situación laboral más habitual. Lo es para el 59,3% de las personas admitidas a tratamiento por heroína y el 34,7% de las ingresadas por alcohol. Son destacables los porcentajes de estudiantes entre los adictos al cannabis (16,1%), que alcanza el 19,9% en el caso de las mujeres.

El modelo más habitual de convivencia, independientemente del tipo de sustancia que motiva el tratamiento, es la familia de origen. En el caso del alcohol, se encuentra muy igualada esta situación con la de quienes viven solos y le supera ligeramente la convivencia con pareja e hijos. Atendiendo al sexo, se observa que los hombres suelen vivir con su familia de origen en mayor porcentaje que las mujeres. En el caso de éstas, el porcentaje que viven en un modelo de convivencia monoparental con hijos, si bien es también un modelo minoritario, es notablemente superior al que se observa entre los hombres.

Las personas que más tiempo llevan consumiendo son las adictas al alcohol, 30,6 años desde el primer consumo (16,3 desde el consumo abusivo), seguida de las adictas a la heroína, con 21,2 años. La cocaína está en los 14,7 años y los hipnóticos y sedantes en 14,6. Por cannabis se sitúa la medida de edad en 11,8 años y por consumo de MDMA en 5,7.

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