El juez que investiga el asesinato de Marta del Castillo ordenó el pasado martes a la Policía que tomara muestras de ADN de María García, la novia de Javier Delgado Moreno, hermano del principal imputado en el caso.

La toma de muestras fue decretada en la misma orden de detención de la joven, pero según fuentes del caso María García ya se había sometido a esta prueba al inicido de la investigación policial, pocos días después de desaparición de Marta del Castillo.

En aquella ocasión, los investigadores también intervinieron su vehículo para buscar pruebas, en concreto restos biológicos de Marta del Castillo, por si el coche podría haber sido utilizado para transportar el cuerpo de la víctima. Poco tiempo después, la Policía le devolvió el vehículo, lo que implica que no encontraron ningún rastro en el coche.

El pasado martes, María García quedó en libertad sin fianza, aunque imputada en el caso, después de ratificar ante el juez instructor que cuando se produjo el crimen, la noche del 24 de enero, estuvo estudiando en el domicilio de su novio, en la calle León XIII de Sevilla. La joven aseguró que aquella noche, su novio, Javier Delgado, le dejó las llaves del piso, donde comenzó a estudiar sobre las 00:30 -ya de la madrugada del día 25- y se acostó sobre las dos de la madrugada. Varias horas después, en torno a las cinco, se despertó cuando se presentaron en la vivienda varios familiares y amigos de Marta del Castillo, aunque según la nueva imputada éstos no llegaron a verla.

La joven también reiteró que Javier Delgado llegó al domicilio sobre las cuatro de la madrugada, tras haber finalizado su jornada laboral en el pub que regenta en el barrio de Nervión.

El vehículo de María García no es el único que la Policía ha examinado durante la investigación de la desaparición de Marta. Lo mismo ocurrió con el Volkswagen Polo propiedad de la madre del menor de 15 años que está imputado como encubridor y que la Policía creía que había sido utilizado en el supuesto traslado del cuerpo de Marta al río. Al igual que en el caso de María García, los agentes también devolvieron el coche a los dueños al no localizar ningún vestigio en su interior.

La entrega de este último coche a los padres del menor tuvo lugar el pasado 12 de marzo y, tan sólo cuatro días después, Miguel Carcaño compareció de nuevo ante el juez para cambiar su versión de los hechos y sostener que arrojaron el cadáver a un contenedor de basura próximo a su casa y no al río Guadalquivir. Esta última versión de los hechos fue ampliada un día después, el 17 de marzo, cuando Miguel Carcaño culpó de la muerte de Marta al menor, al tiempo que reconoció que la adolescente fue violada.

El titular del juzgado de Instrucción número 4 de Sevilla, Francisco de Asís Molina Crespo, continuará hoy la instrucción del caso con la práctica de diligencias y podría llamar de nuevo al principal imputado por el crimen, Miguel Carcaño, en la que sería su cuarta declaración ante el magistrado que dirige la investigación.