Un informe técnico recomienda al Área de Parques y Jardines del Ayuntamiento de Sevilla que valore recuperar el riego en la Plaza Cristo de Burgos, en la Concordia, el Museo, la Plaza Párroco Manuel Camacho y en el Parque del Turruñuelo donde se cortó ese suministro como consecuencia del bando municipal del pasado 3 de octubre que prohibía usar agua potable para este fin como medida preventiva para hacer frente a la sequía.

En estas zonas afectadas por el corte del riego, "podemos encontrar árboles potencialmente peligrosos, con especies que son vulnerables a los periodos de sequía extremos y a las altas temperaturas", recoge el documento firmado por el coordinador del Plan de Gestión de Riesgo de Arbolado de Sevilla y consultor en arboricultura, Mario Gutiérrez, al que ha tenido acceso Europa Press.

El escrito, con fecha de 12 de julio, es una adenda a un informe emitido en marzo de este año en el que los técnicos de la entonces Área de Transición Ecológica y Deportes analizaban cuál era la situación de los jardines tras la promulgación del bando para ahorrar agua en la capital ante la falta de precipitaciones y las altas temperaturas. En el documento, consultado también por Europa Press, se hace referencia a que en el caso de las praderas de césped "no hay opción al no disponer de un riego por difusión con un gasto de agua mayor". "Entendemos que deben mantenerse sin riego" porque, además, reconoce el informe de marzo de 2023, "el riego por difusión, de mantenerse, daría una mala imagen en un estado de sequía". Están afectados por esta falta de riego 22.699 metros cuadrados de pradera.

Riego por goteo

Para el caso de los arbustos, subarbustos y tapizantes que disponen de un riego por goteo con consumos "muy bajos de agua", los técnicos proponían "mantener los riegos reduciendo los tiempos al 50% para que de esta forma, aunque pierdan calidad ornamental, se mantengan sin llegar al punto de marchitez y evitar la muerte de todas las plantas con el consabido coste que supondría la replantación de todas esas zonas verdes". Los metros cuadrados de parterres afectados suman 38.356.

A raíz de este diagnóstico de marzo, la Jefatura de Parques y Jardines solicitó un análisis "pormenorizado" del arbolado ubicado en las zonas analizadas con el objetivo de "valorar las consecuencias que puede acarrear la prohibición de usar agua potable para el riego. El análisis concluye con la emisión de una adenda en la que se recoge que "los meses de junio, julio, agosto y septiembre tenemos picos de registros bastante altos en cuanto a número de incidencias". Aunque no todas las especies se ven afectadas de igual manera, algunas "son más propensas" a fallar en estos periodos, como es el caso del Ficus macrophylla, Gleditsia triacanthos, Melia azedarach, Phoenix dactylifera y el Eucalyptus camaldulensis, entre otras.

Tres factores

Para que un árbol pueda considerarse "potencialmente peligroso", deben confluir tres factores: árboles relativamente grandes ubicados en zonas con mucho tránsito y con posibilidad de un "fallo en base a un defecto o al histórico de fallos de la especie en la ciudad". Estos factores están especialmente presentes en las zonas de la Plaza Cristo de Burgos, en la Concordia, el Museo, la Plaza Párroco Manuel Camacho y en el Parque del Turruñuelo, por lo que los técnicos consideran "razonable afirmar que el potencial de que una parte del árbol falle y pueda causar un daño considerable sobre personas se ve aumentado exponencialmente mientras estas zonas continúen con el riego cortado".

"Es entendible -continúa la adenda- que se limite o elimine el riego en las zonas con agua potable en un periodo de sequía extrema como en el que nos encontramos, donde incluso si persiste, podríamos vernos bajos restricciones para el consumo humano. Pero, desde el prisma de la gestión de riesgo, se considera necesario que existan excepciones o alternativas a esta medida". Ante esta situación, ya los técnicos recomendaban en marzo que "en cualquier caso, se debería comunicar a la ciudadanía por qué estas zonas van a desmejorar su aspecto, explicando la problemática de la situación y, de esta forma, evitar en parte las reclamaciones que se puedan producir en este sentido".

Por vía de urgencia

Sobre esta misma materia, el gobierno municipal ha licitado ya el pliego de prescripciones técnicas para el servicio de riego de árboles y macetones mediante camiones cisternas en Sevilla. Este asunto fue objeto de enfrentamiento entre el nuevo gobierno y el PSOE, que avisó de la "falta" de este tipo de riego en un momento crítico. Desde el Ayuntamiento se contestó que fue el anterior gobierno de Antonio Muñoz el que "dejó paralizado" el contrato tras recurrir la adjudicación una de las empresas licitadoras.

Se ha publicado este pasado miércoles la licitación por la vía de urgencia, con un presupuesto de 99.220 euros (IVA incluido). El periodo de ejecución es de dos meses. Los árboles plantados que serán objeto de riego mediante camiones cisterna se encuentran dispersos por toda la ciudad y, principalmente, en el viario. Los macetones se ubican principalmente en el Casco Histórico, así como en los Distritos Sur, Triana y Los Remedios.

Las rutas "tenderán a agrupar plantaciones próximas de manera que se reduzcan los tiempos de desplazamiento entre posiciones arboladas". Al menos, de manera inicial, se estima que el alcance por jornada, con riegos medios de 50 litros/pie, llegará a 140 posiciones arboladas/equipo. "El riego en las primeras edades es de enorme importancia para facilitar el arraigo y adaptación de la planta que procede de viveros y que debe establecerse en un lugar, por lo general definitivo, para pasados los dos o tres primeros años haber generado un sistema radicular suficiente que le permita la vida en armonía con las condiciones climáticas de la ciudad, y por tanto, ajeno a este cuidado municipal", apostilla el pliego técnico.