El pescado, los lácteos y el pollo empiezan a faltar en los menús de los comedores de los colegios de Sevilla, debido a la huelga de transportistas que sufre el país desde hace más de una semana. El déficit ha obligado a las empresas que se encargan de la gestión de este servicio escolar a cambiar los menús, unas modificaciones que ha de validar la Consejería de Salud.

La Consejería de Educación y Deporte ha enviado este jueves un mensaje de tranquilidad a las familias ante las advertencias de los centros de enseñanza para prevenirles de dicha situación, que ha conllevado a que las empresas encargadas de la gestión del servicio escolar elaboren platos distintos a los previstos. 

A este respecto, la Delegación territorial de Educación que dirige María José Eslava ha descartado la interrupción del servicio, que seguirá funcionando, pese a las circunstancias adversas. Por ahora, ningún colegio ha tenido que prescindir del comedor por la escasez de alimentos. 

"Las empresas proveedoras del comedor escolar se están viendo afectadas por los actuales problemas de falta de aprovisionamiento de determinados productos alimenticios, especialmente de pescado, lácteos y pollo", refieren desde de la Delegación de Educación. 

Dicha carencia ha obligado a las adjudicatarias del servicio a introducir cambios en los menús previstos, que en todo momento serán validados por la Consejería de Salud, garante de que no se alteren los protocolos nutricionales de los menores. 

"La comunidad educativa puede tener la tranquilidad de que los comedores escolares continúan funcionando y que las familias van a seguir contando con este servicio tan necesario para la conciliación, con una alimentación equilibrada y saludable para los escolares", puntualiza el departamento que dirige Eslava.