Alfonso Morón de la Corte, Antonio Benítez, Manuel León, o Lorenzo Clavero son algunas de las 1.786 víctimas asesinadas por el franquismo, cuyos restos óseos se han recuperado de la fosa común de Pico Reja, en el cementerio de San Fernando. La localización y excavaciones en la sepultura común más grande de Europa occidental han culminado, después de seis años de trabajos por parte de la Sociedad de Ciencias Aranzadi y el Ayuntamiento de Sevilla, con la detección de los restos de más de 10.000 personas.

Familiares de las víctimas, asociaciones memorialistas y representantes del Gobierno central, la Junta de Andalucía, la Diputación Provincial y el Consistorio hispalense han acudido a la clausura del último hoyo al descubierto de la fosa común. Un acto en el que la emoción, la justicia y el respeto han sido las notas predominantes que se han materializado en forma de claveles rojos e imágenes de los asesinados.   

"Se trata del mayor proyecto de recuperación de la memoria histórica que se ha llevado a cabo no sólo en nuestra ciudad, sino en todo el territorio español", ha manifestado el alcalde de Sevilla, Antonio Muñoz, quién no ha dudado en afirmar que "una vez culminado el minucioso y riguroso trabajo técnico desarrollado en este espacio podemos concluir que Pico Reja es la mayor fosa común abierta en Europa Occidental desde la de Srebrenica en Bosnia Herzegovina y, desde luego, la mayor de toda España".

Ubicación de las fosas comunes de Sevilla.

Varios familiares de las víctimas, junto con representantes de las asociaciones memorialistas han sido los encargados de echar las palas con tierra que han marcado simbólicamente el final de los trabajos de exhumación y el sellado de la fosa, en cuya superficie se construirá un osario-memorial y un columbario.

Miguel Guerrero Larios, representante de los familiares ha agradecido a "todas las personas e instituciones que han hecho posible estos trabajos, en especial, a todo el equipo de la sociedad Aranzadi" quienes han realizado el proyecto y que se han mostrado visiblemente emocionados durante el acto. También ha querido poner en valor la labor del Ayuntamiento de Sevilla, que "tiró en solitario del carro" para impulsar esta iniciativa en 2018. Por último, Guerrero ha recordado a quienes fueron "arrojados ignominiosamente a la fosa de Pico Reja y cayeron en nombre de la libertad".

En esta misma línea, Muñoz ha expresado que "han sido muchos años de sufrimiento y espera por parte de los familiares. Aquí tenemos algunos que nos pueden contar su experiencia. Como Matilde Hermoso, la nieta de quien fuera alcalde de nuestra ciudad; como Josefa y Carmen Amado, las hijas del concejal Rafael Amado; como Purificación Oliver, la nieta de otro concejal, José Manuel Puelles; como Miguel, nieto de Miguel Guerrero, miembro de la Columna Minera; como Ángel, hijo de Eugenio Rodríguez, sindicalista de la fábrica La Cartuja fusilado en 1936; o como Ana, sobrina de Ramón y Antonio Sánchez, dos vecinos del Cerro del Águila, del Partido Comunista que fueron asesinados". 

"Son solo algunos ejemplos de familiares que hoy nos acompañan junto a las entidades memorialistas que tanto han luchado y reivindicado para que hoy estemos aquí culminando estos trabajos y para que hayamos trabajado de forma decidida para lograr esos objetivos de verdad, justicia y reparación", ha abundado el regidor hispalense.

Osario - memorial y un columbario en memoria de las víctimas del franquismo

Tras la exhumación, la Universidad de Granada será la encargada de realizar los estudios de ADN con las muestras que se han ido tomando a los familiares por parte del Laboratorio Municipal de Sevilla. Se construirá un osario-memorial y un columbario en memoria de las víctimas, donde se puedan conservar de forma adecuada y clasificada los restos. El diseño monumental del columbario se adapta, asimismo, a los límites de la fosa.

Por otro lado, se prevé que haya tres líneas de columbarios realizados en bloques de hormigón armado conformando una plaza triangular con un acceso a pasillos situados en cada uno de los ángulos. La plaza estará aislada, de forma que se genera un espacio de recogimiento para todas aquellas personas que se acerquen al Cementerio de San Fernando. El osario-memorial Pico Reja mantiene la idea triangular de un pico de tres aristas y tres entradas que simbolizan la verdad, justicia y reparación. El inmueble contará, además, con un ciprés, árbol de la memoria, en medio.

El Ayuntamiento de Sevilla anuncia la exhumación de la fosa Monumento

"Pero no nos quedaremos ahí", ha apostillado el primer edil. Durante 2016 y 2017, el Ayuntamiento señalizó tres grandes fosas basándose en los estudios del historiador José Díaz Arriaza: Pico Reja, Monumento y Antigua. Una vez culminados los trabajos de Pico Reja, el objetivo es iniciar el expediente para la exhumación de la fosa Monumento. Estos estudios se iniciarán a lo largo de 2023. Por ello, el alcalde de Sevilla ha expresado que desde el Consistorio hispalense "vamos a liderar este proceso manteniendo el mismo modelo que ha funcionado hasta ahora".

Rehabilitación de la antigua cárcel de La Ranilla

Muñoz ha anunciado que, a lo largo de este primer trimestre, terminarán las obras de rehabilitación del edificio de la Ranilla tras una inversión de más de un millón de euros. Este inmueble, por el que accedían a la prisión los reos y donde se ubicaban también las oficinas y hasta las viviendas de los responsables, es el único resto físico que existe de la antigua cárcel de la Ranilla, que se demolió en 2008 tras haber dejado de funcionar como prisión provincial en el año 1991 y haberse mantenido hasta 2006 como centro de tercer grado. El mes pasado se licitó la redacción del proyecto museográfico para este espacio que se ejecutará durante el año 2023.

"Por tanto, hemos culminado una gran iniciativa, la mayor de memoria histórica que se ha ejecutado en España. Es un reflejo de nuestro compromiso con las víctimas y con el movimiento memorialista. Somos un referente a nivel nacional e internacional. Y vamos a seguir siéndolo", ha concluido Antonio Muñoz.