No iba mal encaminado el Cabildo cuando el pasado 28 de diciembre aprobó un presupuesto para 2013 con un tijeretazo de casi un 15%. La principal causa era una previsión en la caída del turismo del 6% para el año en curso, la misma estimación con la que ya se realizaron las cuentas de 2012. Enero ha concluido con un descenso incluso mayor, pues se ha registrado una reducción del 7,6% en el número de visitantes. Por la Catedral han pasado 4.237 turistas menos que en el primer mes de 2012. Los datos son reveladores, pues han aumentado los turistas que acceden con una modalidad de entrada más económica (un 3,75% más) y ha caído el número de los que pagan la entrada general de ocho euros (un 9% menos). La mayor caída se ha contabilizado entre los invitados, con un 13% menos en el primer mes del año.

En 2012 entró en vigor la nueva modalidad de entrada reducida, que pasó de dos a tres euros. De ella se benefician los estudiantes menores de 26 años, los pensionistas y los jubilados mayores de 65, que vistos son los datos son los que han aumentado. El acceso sigue siendo gratuito para los residentes en la Archidiócesis de Sevilla, los menores de 15 años acompañados por un adulto, los discapacitados y los desempleados, todos previa presentación de la documentación acreditativa correspondiente.

El Cabildo ha apostado por un presupuesto muy restrictivo, de crisis, y preparado para las peores previsiones. Entre las principales medidas económicas tomadas para 2013 destacan que las tarifas de la entrada turística a la Catedral quedan congeladas para evitar una disminución de los ingresos aún mayor, así como queda suspendido cualquier proyecto nuevo de conservación del templo. El presupuesto de gastos fijos representa un 93% del total, por lo que el presupuesto de nuevos compromisos para este 2013 es tan sólo de un 7% del total. Y ninguno se corresponde con grandes proyectos como los que se han afrontado en la última década (restauración del Giraldillo, arreglo de los pilares agrietados, acondicionamiento de las cubiertas para la visita por grupos, etcétera). Las grandes apuestas por la conservación deberán esperar a tiempos más boyantes.

La Catedral registró en 2012 un total de 1.320.000 visitas. La previsión de ingresos por el turismo asciende para 2013 al 96,56% del total de ingresos, por lo que la Catedral sigue viviendo de los turistas. La economía de la Catedral depende del turismo.