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Los efectos de la pandemia

El transporte escolar de Sevilla exige dos millones de euros en indemnización a la Junta

  • El sector alerta de que está al borde de la asfixia financiera al expirar la demora dada por los bancos para pagar las deudas

  • Los empresarios protagonizan esta semana tres jornadas de protestas ante San Telmo y el Parlamento 

Protesta de la patronal de Atedibus delante del Palacio de San Telmo.

Protesta de la patronal de Atedibus delante del Palacio de San Telmo. / Juan Carlos Vázquez

El transporte escolar y discrecional (el de las rutas turísticas) se encuentra al borde de la asfixia financiera. Así lo ha expresado este martes Roberto Gutiérrez, vicepresidente de Atedibus, la patronal que engloba a dicho sector, seriamente perjudicado por la crisis del Covid, motivo por el cual exige a la Junta de Andalucía que materialice las ayudas para un colectivo que tendrá que enfrentarse, además, el próximo mes al fin de la demora en el pago de la deuda bancaria. 

La pandemia ha afectado a sus dos actividades esenciales. Por un lado, la del transporte escolar, cuyo contrato con la Consejería de Educación y Deporte se encuentra prorrogado este curso, tras permanecer cuatro meses en 2020 (marzo, abril, mayo y junio) sin prestar servicio al suspenderse las clases presenciales en colegios e institutos. Los empresarios llevan desde entonces reclamando una indemnización que, en el caso de la provincia de Sevilla, según fuentes de Atedibus, asciende a 2,2 millones de euros. De esta cantidad, Gutiérrez lamenta que sólo han recibido un 15%. 

El otro frente abierto es el de los desplazamientos turísticos, una actividad que aún tardará en recuperarse. Como muy pronto en septiembre, pues por ahora lo que está llegando a Sevilla es turismo individual o en grupos muy reducidos. "Los compañeros de Málaga puede que tengan más suerte en verano, pues la oferta de sol y playa los beneficiará", incide el vicepresidente de Atedibus, que considera que el Gobierno andaluz los ha ha abandonado en plena crisis. 

En este sentido, recuerda que la Junta les prometió una ayuda de 1.700 euros por tarjeta de transporte, es decir, por autobús. Dicha cantidad, para Gutiérrez, resulta "insuficiente" si se compara con la que otorgan otras autonomías, como la Comunidad Valenciana, donde dicha subvención llega a 8.000 euros". 

El colectivo lo integran en la provincia de Sevilla 75 empresas con 300 autobuses (de tamaño grande y pequeño). De dicha cantidad, sólo se han movido el último año 80 vehículos, esto es, sólo una cuarta parte de la flota. Este porcentaje conlleva a una drástica reducción de empleo. No hay datos oficiales sobre la pérdida de puestos de trabajo, aunque Gutiérrez pone de ejemplo lo ocurrido en su empresa, donde se ha despedido a diez personas. 

Gastos extra de limpieza

Otra reclamación del sector concierne a los gastos de limpieza extra para hacer frente al Covid, que incluyen mascarillas, geles hidroalcohólicos y diversos desinfectantes. En el caso de la provincia de Sevilla, según los cálculos de la patronal, la cantidad alcanza los 1,2 millones de euros, que también reclaman a la Junta. 

El principal problema que se encuentra el sector a la hora de dirigirse a la Administración autonómica es que está "en tierra de nadie". En el transporte escolar, depende de la Agencia Andaluza de Educación, órgano de la Consejería de Educación y Deporte. Pero para el resto de las ayudas, toda comunicación ha procedido hasta ahora de la Consejería de Fomento. Los empresarios exigen que para el transporte discrecional se les haga partícipes de la mesa de turismo de la Junta, y que dependan de esta consejería, petición que, de momento, ha caído en saco roto. 

La patronal ha realizado estas declaraciones en una concentración organizada frente al Palacio de San Telmo, sede de la Presidencia de la Junta de Andalucía. El calendario de movilizaciones continuará hasta el jueves, cuando hay convocada una protesta delante del Parlamento para recordar sus exigencias.