El Juzgado de Primera Instancia número 10 de Sevilla ha notificado este martes a las dos partes el auto por la petición de medidas cautelares presentado por José María del Nido Benavente contra el pacto de gobernabilidad firmado en 2019 por la mayoría de los máximos accionistas del Sevilla. El lunes se conocía, desde el entorno del ex presidente sevillista, que éste había salido ganador con la resolución judicial en el sentido de poder votar en la próxima Junta General de Accionistas de la entidad que tendrá lugar el próximo 29 de diciembre en Fibes.

Era la versión que salía del propio José María del Nido hacia quienes le preguntaron, mientras en la otra parte, los abogados que llevan la representación jurídica de José Castro y José María del Nido Carrasco se pedía prudencia en las valoraciones hasta poder leer el auto judicial y sus argumentos jurídicos.

El auto llegaba en la mañana de este martes a las dos partes y el análisis jurídico, lógicamente, depende del cristal con el que se mira. Si José María del Nido Benavente pregonaba entre sus más afines que ya podía votar y que en la Junta obtendrá la presidencia del Sevilla, en la otra parte se ven las cosas de forma muy diferente. En concreto, se apunta que el auto declara de nuevo plenamente vigente el pacto de gobernabilidad de la entidad.

¿Qué quiere decir esto? Pues, según los juristas de la parte demandada, el auto es "prácticamente" lo mismo que el año pasado. En esa ocasión fue la Audiencia Provincial la que en octubre de 2021 resolvía que el ex presidente podía representar a sus propias acciones en la Junta de Accionistas.

José María del Nido Benavente, por tanto, puede ejercer el voto directamente, sin la limitación que supuso hace dos años tener que hacerlo a través de su hijo, José María del Nido Carrasco, pero con la condición, también recogida en el auto, de que el pacto de gobernabilidad sigue aún vigente.

Y siguiendo con las preguntas, ¿qué puede suponer esto? Sencillo, que también siguen en vigor las cláusulas de penalización que ambas partes firmaron cuando se llevó a cabo el llamado "Pacto por la pasta", que les ha dado muy buenos dividendos a todos los máximos accionistas del Sevilla para evitar, entre otras cosas, que éstos vendieran sus acciones a grupos externos.

Hay que recordar que, en la pasada Junta, pese a tener ese derecho al voto, José María del Nido Benavente no lo llegó a ejercer e incluso se quejó de que el mando con el que tenía que hacerlo no funcionaba por falta de pilas. El riesgo de enfrentarse a unas demandas judiciales por romper el pacto estaba ahí, sin duda.

Probablemente en la misma Junta General, se trate de alinear el sentido del voto de todas las partes que suscribieron el pacto, directamente con José María del Nido Benavente, por lo que se le pedirá que alinee el voto con el de su hijo José María del Nido Carrasco y con José Castro. Cada uno actuará después como prefiera, con los riesgos de ruptura del acuerdo que eso supone siempre y las posibles consecuencias jurídicas.

El otro matiz es el número de acciones que puedan controlar ambas partes, pues se han seguido produciendo numerosos movimientos de compra y venta de títulos del Sevilla y habrá que comprobar el número que controla José María del Nido Benavente y el grupo que lo apoya de Los Americanos para saber si se arriesga a esas posibles penalizaciones millonarias o no lo hace, como sucedió el año pasado.