José Castro replicó a José María del Nido tras su crítica a las "cuentas ruinosas" del Sevilla y su anuncio de que asaltará el poder de forma "irreversible". El presidente del club blanquirrojo ha calificado su denuncia de "ruina" de "algo ridículo". "Hablar de un club arruinado cuando hemos tenido la posibilidad de vender a un jugador por 50 millones de euros y por todas las circunstancias, económicas, financieras y deportivas, se ha decidido no vender es ridículo". Además, se mostró convencido de ganar la Junta: "Los sevillistas no quieren cambio y el martes lo vamos a ver".

"Decir que el club está arruinado es ridículo", insistía Castro en el programa nocturno El Pelotazo, de Cope nacional. "Tenemos una situación envidiable. Este año recogemos las pérdidas del año pasado. No somos un club que malvenda a sus activos. Entendimos que no había que vender a este jugador porque también desmerecíamos el nivel deportivo del club", argumentó.

Castro explicó que un club en ruina sí habría vendido a Koundé. "Es así de fácil. Si hubiéramos vendido a Koundé presentaríamos un beneficio de nueve millones de euros. Claro que sí".

E inmediatamente pasó a recordar los logros deportivos bajo su mandato, algo que Del Nido interpretó anteriomente como "escudarse en el primer equipo, cuando debe ser la entidad la que proyecte y sostenga al primer equipo y no al contrario". "Hay algo que no engaña a nadie, que es la razón y los resultados. El rendimiento deportivo del Sevilla es evidente. El Sevilla ha seguido creciendo. Desde que yo soy presidente, hemos ganado cuatro Europa League, de ocho posibles clasificaciones europeas hemos conseguido las ocho, el año pasado, a falta de tres o cuatro jornadas, peleamos por llegar al final con posibilidades de ganar la Liga". 

Y también atacó a Sevillistas Unidos 2020, la sociedad que se apoya en 777 Partners con la que Del Nido ha pactado el asalto al poder del Sevilla: "Solicitaron la Junta Extraordinaria el 12 de agosto, justo en mitad de la planificación. Se va a hacer en casi en noviembre, cuando en diciembre íbamos a celebrar la Junta Ordinaria, en la que podían tratar todo lo que ellos hubieran querido".

Apoyo del sevillismo de base

Sobre el desenlace de la votación respecto a los puntos del orden del día de la Junta Extraordinaria, la remoción del consejo y la elección de uno nuevo, Castro se mostró convencido de la victoria de su grupo: "Hay muchísimos sevillistas de base que nos van a apoyar. En las últimas semanas he tenido una cantidad de apoyos abrumadora -sindicaciones de acciones mediante-. La gente no quiere cambio. Habrá un momento en el que yo saldré de presidente y la entidad seguirá". 

De ahí pasó al ataque directo a Del Nido y sus razones para este asalto al poder, criticando también las razones de los Americanos: "Tiene ansias de poder y se une a un grupo americano que sólo le interesa el dinero. Su representante estuvo en el consejo siete u ocho meses y sólo hablaba cuando se trataban temas económicos. Su intención es hacer una ampliación de capital y quedarse el Sevilla. Pues en la última junta dos terceras partes de lo sevillistas accionistas allí presentes se le denegó. Sólo quieren dinero y mandar ellos, y el Sevilla es de todos".

El dirigente utrerano abundó en este aspecto: "Le aseguro que los sevillistas no quieren cambio y el martes lo vamos a ver". ¿Tan convencido está Castro de su victoria? "Yo ya le he dicho lo que pienso que va a ocurrir. Los sevillistas no quieren cambio. Los cambios en los clubes se hacen cuando las cosas van mal. Y somos cuartos, estamos en la Champions, el club está en uno de los mejores momentos de su historia".

La ruptura del pacto de gobernabilidad

Del Nido excusó su asalto irreversible al poder para "dar un cambio de tuerca" y fundamentándose en las cuentas presentadas en la Junta de 2020. Sin embargo, mucho antes de aquella asamblea del 4 de diciembre o de la presentación del presupuesto, ya mostró su intención: el 4 de febrero revocó notarialmente a su hijo José María del Nido Carrasco la representación de las acciones de su familia. Y el 12 de julio de 2020, antes de conocer los movimientos de mercado de futbolistas, rompió el pacto de gobernabilidad suscrito entre las partes el 22 de noviembre de 2019.

Castro aseguró que el pacto fue idea de Del Nido padre: "Hace dos años la solución de esto partía por un pacto que él propone. Su hijo, con el aval del padre, lo realiza. Pero a él no le vale. Y como no le vale este pacto, no le valdrá lo que venga. El Sevilla es una entidad muy importante, muy seria, que crecemos en lo deportivo, en lo social y en lo económico. Eso de que en tres meses hará otra junta será o seró, no sé si la ley se lo podrá permitir. El Sevilla tiene que avanzar y seguir".

"Hace dos años hicimos un pacto por la estabilidad del club y yo no quería ningún pacto, porque lo conozco, porque sé que se salta todo pacto, se salta hasta la ley. Después de tres meses de negociaciones con su hijo, mi actual vicepresidente, decidí aceptar el pacto. Pero le duró tres días. A los tres días Del Nido ya no quería el pacto. Es que esto es anormal, atípico", añadió Castro.

Ahí aseguró que el sevillismo está harto de esas "bravuconadas" de Del Nido. "Díganme ustedes que qué se puede pensar cuando en el Sevilla, que es ejemplo de muchas cosas, se está buscando un cambio en la gestión del club. Nadie lo entiende, pero yo sí lo entiendo. El sevillismo está harto de sus bravuconadas. Cuando fue presidente lo hizo bien y hay que reconocérselo. Pero cuando no está no le importa asociarse con unos americanos e intentar controlar el club, que no es suyo, es de todos. El sevillismo no es tonto. Y si Dios quiere tenemos los apoyos necesarios para no tener que hacer cambios que no queremos hacer, porque el rumbo de la entidad va bien".

Deslealtades y traiciones

Otra de las réplicas de Castro a Del Nido fue la de su constante deslealtad, en contraste con el periodo en el que el utrerano fue su subordinado: "Yo fui un vicepresidente fiel durante doce años. Ayudé a la estabilidad del club. Cuando él es el que está fuera, la estabilidad parece que no tiene que existir. No ha parado nunca de crear problemas desde que yo estoy en la presidencia. Cree que el Sevilla es de su propiedad y está muy equivocado".

Además, fue preguntado directamente por la venta de 400 acciones de Luis Galán a un aliado de Del Nido y su salida del consejo de administración, adonde llegó precisamente de la mano de Castro, en la Junta de Accionistas de 2015, es decir, hace seis años. Otra deslealtad denunciada por el presidente: "Sí, lo hizo. No me sorprendió numéricamente por acciones, sino por el gesto y por la persona (Luis Galán), porque estaba en el consejo con nosotros".