A poco más de una semana para que arranque la Liga, la preparación del Sevilla parece sufrir un frenazo. El equipo debía jugar un amistoso de nivel hoy frente al Aston Villa, un último test para llegar al inicio oficial de la temporada en la mejor forma posible, pero la vida, y más en estos tiempos, da giros inesperados a causa de la pandemia. Si el conjunto nervionense anunciaba la suspensión del viaje a Inglaterra con un mensaje ambiguo y poco concreto en el que apuntaba sólo "por motivos del Covid-19", el club inglés, que ha tenido que buscar un rival alternativo, especificaba que "el equipo español no viajará debido a un brote de Covid-19 en la plantilla".

No se movió el cuadro hispalense de su posición inicial y nada más ha informado a través de su canales oficiales sólo que "no disputará más amistosos antes del ya inminente debut en la Liga, frente al Rayo Vallecano en el Ramón Sánchez-Pizjuán el próximo 15 de agosto a las 22:15".

Cuando la entidad sevillista publicó el comunicado saltaron las alarmas. Era un partido programado desde hace tiempo y aunque desde fuentes internas se apuntó, en un principio, a una medida de prevención debido al alto riesgo existente en Inglaterra de contagio, la explicación generaba tantas dudas como la nota inicial. Una cancelación tan de última hora sonaba, cuanto menos, extraña, con entradas ya vendidas por parte del conjunto británico para el choque.

El equipo no jugará más amistosos hasta su debut liguero ante el Rayo el 15 de agosto

Finalmente fue el Aston Villa el que dio algo de luz, ya que anunció en sus redes sociales que buscaba un nuevo rival en lugar del Sevilla para el duelo que debían disputar en Villa Park por un brote de Covid-19 en el conjunto andaluz.

Falta, por supuesto, que el Sevilla ofrezca su versión de los hechos, ya que otras veces que hubo algún caso positivo en la plantilla lo dio a conocer sin problemas. En plena quinta ola el contagio vuelve a ser algo habitual, si bien por fortuna la mayoría de jóvenes, especialmente deportistas, lo pasan de forma asintomática y con leves efectos. La plantilla que dirige Julen Lopetegui trabajó el jueves en el que iba a ser el penúltimo entrenamiento en la ciudad deportiva sevillista antes de viajar a Inglaterra y este viernes estaba planificada una nueva sesión antes de que el equipo se desplazara a Birmingham.

El partido contra el Aston Villa iba a ser el quinto amistoso de pretemporada, después de los triunfos ante el Conventry City (4-0) y Las Palmas (1-0) y los empates contra rivales de gran entidad como el PSG (2-2) y frente a la Roma (0-0).

Lopetegui se queda sin tiempo para afinar en este tramo final de la pretemporada, en el que la operación salida sigue abierta, más allá de la venta de Koundé todavía latente, y se espera todavía algún fichaje. Un final del verano muy movido para el Sevilla, que debe iniciar el campeonato liguero en apenas una semana con las dudas que genera el posible brote de coronavirus que el club ni confirma ni desmiente.