Munas Dabbur está protagonizando un curioso caso en la relación entre la afición del Sevilla y Julen Lopetegui. En general, el técnico guipuzcoano está contando con el aplauso generalizado de hinchada y crítica, y ahí están los números para avalar ese plácet. Pero la gestión del delantero centro, la apuesta firme de Lopetegui en De Jong y el casi ostracismo que está sufriendo Dabbur abren una pequeña grieta en esa relación.

El internacional israelí no ha disfrutado aún de la posibilidad de debutar en la Liga. Tampoco en el Ramón Sánchez-Pizjuán. De hecho, es el futbolista que menos veces ha entrado en la convocatoria de Lopetegui, al que la prensa le pregunta constantemente sobre este asunto y siempre saca a colación que hay otros futbolistas y que ya le llegará su hora.

"A Dabbur le sonará el despertador como les ha sonado a otros y debe estar preparado", dijo recientemente el técnico sevillista al ser cuestionado por el punta palestino.

Dabbur sólo jugó los minutos finales del Qarabag-Sevilla y la afición quiere verlo. Ante el APOEL puede darse el deseado encuentro entre hinchada y delantero...

Hasta ahora, apenas ha disfrutado de esos minutos de la basura en el partido de Bakú, puesto que salió en el minuto 86 por Óliver Torres, con el partido ya completamente resuelto tras el 0-3, que subió al marcador precisamente el medio extremeño.

Sucede que en las siete jornadas de Liga disputadas hasta ahora ni siquiera ha entrado en alguna convocatoria. Todo lo más, en alguna preconvocatoria amplia, para terminar siendo siendo siempre uno de los descartes por decisión técnica.

La entidad del rival, el APOEL chipriota, con todos los respetos que se merece un rival europeo, y la proximidad del partido en el Camp Nou, donde Chicharito podría tener cancha para su fútbol al preverse un partido con espacios, le podrían dar la ocasión a Dabbur de tener algo más de escaparate. Y Nervión espera al punta de los 37 goles que fichó el Sevilla aún con Joaquín Caparrós al frente...