El Sevilla y Rakitic están encaminados a reencontrarse. La situación del futbolista de Möhlin (Suiza, 10-03-1988) es clara: ya ha recibido la comunicación por parte del Barcelona de que está en la lista de descartes que Ronald Koeman está realizando para su revolución azulgrana. El Sevilla necesita un futbolista con galones, con carisma, fútbol y capacidad de sacrificio que supla de algún modo el hueco de Banega, que se va con los mismos 32 años que tiene ahora Rakitic; y éste ha aireado innumerables mensajes de cariño hacia el club que lo encumbró a la fama.

En este contexto, desde Italia se ha desvelado cuál habría sido la oferta que le ha puesto encima de la mesa a Rakitic para que se decante definitivamente por su vuelta a Nervión, tal y como desean él y su familia. Nicolò Schira asegura que sería una vinculación por dos temporadas, más otra opcional, y que cobraría 3,7 millones de euros netos más bonus por objetivos.

El Sevilla rebajaría así a algo más de la mitad de lo que cobra en el Barcelona actualmente (7,8 millones netos más pluses), pero el internacional croata sabe perfectamente que en Nervión debe olvidarse de esas cifras astronómicas. La sintonía con el futbolista siempre ha sido buenísima, aunque Monchi bromeara públicamente hace poco diciendo que hacía tiempo que no recibía ningún whatsapp de él.

El último guiño de Rakitic fue la publicación de un vídeo en el que sus familiares grabaron cómo se tiraba a la piscina para celebrar el gran logro del Sevilla ante el Inter, en medio de la tormenta dislocada que está viviéndose en el Camp Nou. El suizo croata ya es pasado del Barcelona y lo sabe, pero queda lo más difícil.

Y esto es tratar de no pagar un traspaso al Barcelona, dado que el montante de la operación para el Sevilla ya se iría hasta más de 15 millones, sumando las nóminas que cobraría en bruto el futbolista. Ocurre que en Can Barça ahora mismo todo es una locura, no hay forma de negociar con nadie, tras el lío montado con el anuncio de Messi de su marcha y con Bartomeu en el filo de la navaja. Por ello, el Sevilla debe esperar a que las aguas se calmen en Barcelona, con el as en la manga de que Rakitic quiere firmar.