La afición del Sevilla canta y alienta. "Mendilibar nos lleva a Budapest" sonó tras el pitido final y luego los jugadores se dirigieron a Gol Norte para agradecer ese apoyo, que está enfilado hacia la final del miércoles en Budapest ante la Roma. La derrota ante el Madrid, injusta por merecimientos de uno y otro, queda en un segundo plano.
Se adelantó el Sevilla bien pronto, tras una buena acción desde la izquierda de Bryan y Acuña y golazo de zurda de Rafa Mir (3') e igualó después Rodrygo de falta (29') en un disparo por el lado del portero que se comió Bono, más pendiente de tapar el lado de la barrera.
Mereció más el Sevilla, mejor plantado en el campo que el Madrid. Pero, tras buenas llegadas en la segunda mitad, una falta mal sacada por Joan Jordán se convirtió en una contra letal del Madrid que remató con calidad Rodrygo. Posteriormente, mientras el Sevilla intentaba reaccionar, se produjo la expulsión de Acuña y ahí ya terminó prácticamente el encuentro.
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