Caparrós, muy pendiente de un Gol Norte en el que ya no lucen los famosos palos de la discordia

Joaquín Caparrós conoce perfectamente la idiosincrasia del Sevilla Fútbol Club. El técnico utrerano, que ha regresado a la entidad hispalense en medio de una tormenta que ha coincidido con la Semana Santa, ha querido que sus jugadores estén sobre el verde del Ramón Sánchez-Pizjuán el día antes de recibir a un Deportivo Alavés que se la juega en Nervión. En la sesión de entrenamiento, que ha discurrido con la normalidad habitual, se ha podido ver que en el Gol Norte no están los famosos palos metálicos que se habían visto semanas atrás frente a la grada.

La imagen, compartida por varios usuarios en redes sociales, había encendido las alarmas en la hinchada hispalense, que pensaba que esa zona del estadio se vería afectada tras las protestas llevadas a cabo por Biris Norte durante el partido frente al Atlético de Madrid. El grupo ultra del Sevilla lanzó cartulinas amarillas, santo y seña de la guerra contra la directiva, en forma de pelotas de papel al césped del feudo sevillista, lo que provocó al detención momentánea del encuentro y derivó en una sanción contra el club.

Sin embargo, este Sábado Santo los palos no estaban en el Ramón Sánchez-Pizjuán. Joaquín Caparrós llegó y se fue directamente a observar un Gol Norte que lo aclamaba hace unas semanas en el partido frente al Athletic Club. Biris Norte, que está realizando un tifo por partido para celebrar sus bodas de oro, desplegó una pancarta gigante con una imagen del técnico utrerano junto a la frase "Caparrós, te quiero" y el símbolo de Batman, su apodo debido al increíble parecido que tiene con Michael Keaton, algo que parece haber terminado siendo incluso premonitorio.

Con el sevillismo por bandera

Si algo define a Joaquín Caparrós es su devoción por el Sevilla Fútbol Club. El flamante entrenador del combinado hispalense reconoció en su presentación que dijo sí en cuanto lo llamó José María del Nido Carrasco, algo que el presidente del conjunto nervionense había comentado con anterioridad. Su llegada a Nervión sirve también para calmar un ambiente tenso, que se prevé aún peor en el duelo frente al Deportivo Alavés con la manifestación convocada por Biris Norte tanto antes como después del encuentro.

La unión debe ser el eje fundamental entre el equipo y la afición para un final de temporada agitado. A falta de siete jornadas para finalizar LaLiga, los de Nervión deben apretar para alejarse del descenso y seguir soñando con unos puestos europeos que están tan cerca como la zona baja de la tabla. No le queda ningún partido fácil al combinado hispalense, ya que todos sus rivales están inmersos en distintas peleas por ver cómo finalizan el curso.

Si el Sevilla vuelve a quedarse fuera de competición continental, sería la primera vez desde el año 2003 que no encadena dos clasificaciones seguidas. Curiosamente, Joaquín Caparrós fue el entrenador que consiguió meter a los hispalenses en Europa hace 20 años después de una sequía intensa. Tanto en la parroquia nervionense como en la planta noble del club confían en que el regreso del utrerano sirva para enmendar el mal discurrir de esta temporada.