Sevilla-Barcelona

Así jugaron los futbolistas del Sevilla ante el Barcelona

  • En un partido sin ritmo ni tensión, apenas tres o cuatro futbolistas pusieron cierto tesón y vergüenza torera en la despedida de una temporada nefasta

  • Final entre airadas protestas (1-2)

Ocampos protege el balón ante Fermín.

Ocampos protege el balón ante Fermín. / Juan Carlos Muñoz

El Sevilla se despidió en un simulacro de partido. Sin apenas tensión defensiva, la imagen no fue la correcta cuando además desde el exterior había estímulos contradictorios. Pocos nombres propios pusieron lo que había que poner, Nyland, Sergio Ramos, Kike Salas y en los primeros minutos, Lukébakio. En-Nesyri también dio el callo viendo puerta.

Nyland De lo poco que pudo salvarse. No pudo hacer nada en los goles y evitó una resultado de escándalo.

Badé Trató de poner tensión, pero fue superado en numerosas ocasiones.

Sergio Ramos Fue de los más activos. En el que pudo ser su último partido con la camiseta del Sevilla, al menos la sudó.

Kike Salas Mucho corazón. Rebelado ante la pasividad, salió de zona con el hacha varias veces, hasta que vio la amarilla...

Juanlu Es un jugador que tiene energía y eso es muy bueno, pero tiene muchas cosas que pulir. Muchas.

Soumaré Comenzó con un gran pasotismo. Le quitaban balones por detrás y quedó retratado en el 0-1. Después mejoró y dio un pase de gol. Pero retrocedía mucho cuando el Barça tocaba y tocaba.

Agoumé Acciones interesantes en un partido sin apenas ritmo.

Pedrosa Algún buen centro y cierta movilidad. Suficiente para estar tanto tiempo sin jugar.

Ocampos En su línea de batallar sin precisión. No hace grandes cosas, pero cuando no esté se le echará de menos.

Lukébakio Comenzó con más ganas e ímpetu que nadie con alguna acción espectacular, para acabar diluyéndose.

En-Nesyri No faltó a su cita con el gol. Puede que el último.

Marcao Muy pesado. Si hubiera habido algo en juego... habría chirriado.

Mariano La grada lo ridiculizó jaleando cada contacto suyo con el balón.

Manu Bueno Es lo que viene.

Gudelj Un impulso moral.

Véliz Se va como vino. Nada.

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