El encuentro del próximo sábado en el Camp Nou (20:30) entre el Barcelona y el Sevilla supone mucho más que un enfrentamiento entre los dos primeros clasificados de LaLiga. La cita ofrece un duelo paralelo con el frente a frente que van a librar los líderes de ambos equipos, los dos conductores del juego en los equipos que dirigen Ernesto Valverde y Pablo Machín.

Leo Messi y Éver Banega, argentinos, rosarinos ambos, compañeros e íntimos amigos en la selección albiceleste, son dos líderes con aura que marcan el juego de sus equipos, dos diez con estilo y predicamento. Quizá el sevillista desde unos metros más atrás que el crack del Barça, pero igualmente siendo los directores de orquesta, los jugadores que llevan la batuta y que marcan el ritmo al resto de compañeros.

Las dos estrellas han sido liberadas por el nuevo seleccionador argentino en sus dos primeras convocatorias, la primera en los enfrentamientos ante Guatemala y Colombia en septiembre y ahora frente a Irak y Brasil. Leonel Scaloni ya ha explicado que ambos van a seguir formando parte del futuro de Argentina. Messi decidió por iniciativa propia tras el Mundial de Rusia apartarse un tiempo de la albiceleste, pero prometiendo volver, y a Banega, cargadísimo de partidos en este primer tramo de competición, le ha venido bien la decisión de Scaloni de aprovechar estos partidos para ver jugadores que no eran habituales en la selección, entre ellos su compañero Franco Vázquez. “Hablé con Banega y Di María y les expliqué que quiero seguir viendo a los jugadores que vienen siendo convocados”. Igual que Di María, Messi o Banega, Scaloni también ha dejado fuera en estas citaciones a otros históricos como Sergio Agüero o Gonzalo Higuaín, nombres propios que le han dado mucho futbolísticamente a Argentina.

Por ello, tanto Messi como Banega preparan el choque del sábado a conciencia, sin la habitual paliza de viajes, entrenamientos y partidos internacionales, y sus entrenadores esperan que den todo lo que tienen en un duelo que va a decidir la cabeza de LaLiga.

Además, ambos son referencia estadística en varios aspectos del juego en el actual campeonato. Si Banega hasta la última jornada era el jugador de LaLiga que más balones recuperaba, con 18 –ahora lo supera con 22 Nacho, del Valladolid–, Messi es el líder en asistencias totales (28) y en remates a portería (18).

Dos colosos que marcan el ritmo y de cuyo estado de forma dependerá en gran parte el resultado del sábado.