Surachate Hakparn (conocido como Big Joke), el policía al frente de la investigación del crimen cometido por Daniel Sancho, contó en exclusiva al programa Y ahora Sonsoles cuál fue la estrategia que los agentes llevaron a cabo para ganarse la confianza de Daniel Sancho y conseguir que este confesara los hechos.

De esta manera ha confirmado que la cena en el restaurante de la que tanto se habló en los medios sí que tuvo lugar, finalmente, y fue toda una estrategia para que el chico declarara ser el autor del crimen.

"Cuando fue a comisaría, nosotros vimos todo muy extraño, nos olió mal. Es verdad que lo llevamos a cenar al mejor restaurante de la isla para sacarle información, le invitamos a cenar para ganarnos su confianza", relató en el programa de Antena 3 el policía.

"Durante esa comida, nosotros le reteníamos en el país haciendo que no saliese de Tailandia", indicó Big Joke. Además, aseguró que, mientras cenaban con él, otra parte del equipo se encargaba de analizar las grabaciones que habían encontrado en las cámaras de seguridad.

En las semanas posteriores a que tuviera lugar esta cena los responsables del restaurante desmintieron esta información por eso no se sabía con seguridad dónde había estado Daniel Sancho cuando decía estar cenando con la Policía, como si no hubiera pasado nada. Ahora se ha podido confirmar que sus palabras eran ciertas.

Además de esta información, Surachate desmintió que el chef español, hijo del actor Rodolfo Sancho, estuviera disfrutando de privilegios dentro de la cárcel de Koh Samui. "No tendrá nada de privilegios. En cuanto pase a la prisión de Koh Samui, pasará con el resto de presos", aseveró, refiriéndose al momento en el que el joven deje el módulo de enfermería en el que está desde comienzos de agosto como consecuencia de una hernia discal que le provoca fuertes dolores de espalda.

Al hilo de esto el inspector negó que a Daniel Sancho se le fuera a trasladar a la prisión de Bangkok, algo que ha trascendido a los medios en los últimos días. En este sentido, éste explicó que hasta que tenga lugar el juicio y haya una sentencia condenatoria (algo que podría extenderse incluso hasta a mediados del próximo año) el acusado permanecerá en la prisión de Koh Samui.