Ana María, panadera en Mataró, fue condenada a 44 años de prisión en 2012 por matar a dos ancianas de 81 y 86 años. La mujer, que ha estado durante 11 años cumpliendo condena ya goza de un permiso penitenciario de una semana y los familiares de las víctimas se encuentran aterrorizados e indignados porque se han encontrado con la asesina por las calles del municipio.   

Ana María era “obsesiva e hipocondriaca” y así lo recoge la sentencia del caso. Regentaba la panadería “La iaia Anita”, motivo por el que era una persona muy conocida en el barrio. Esa confianza fue la que le sirvió para acabar con la vida de las dos ancianas.

La hija de una de ellas contaba a los medios de comunicación “Ella ha sido vecina del mismo bloque desde hace bastante tiempo y, bueno, sí, era amiga de la familia”.

Los hechos ocurrieron en mayo de 2012 en el municipio de Mataró, en Barcelona. Con pocos días de diferencia aparecieron los cadáveres de dos mujeres. Una de ellas era Teresa. En ambos crímenes había muchas coincidencias.

Las dos estaban en el interior de sus casas en el momento en el que fueron asesinadas. La agresora les golpeó la cabeza en primer lugar y luego, les asestó varias puñaladas. Entre cada asesinato hubo varios días de diferencia pero poco después acabó cayendo y fue detenida. 

El móvil del asesinato

El móvil del crimen pudo ser económico porque la asesina tenía varias deudas. A una de las víctimas le robó 4000 euros y varios objetos de valor. Con la otra intentó lo mismo pero no pudo porque había guardado su dinero en una caja fuerte.

Las personas de su entorno llegaron a decir que era una persona que siempre se estaba quejando por tener tantos gastos. Por todo ello, en 2015 Ana María fue condenada a 44 años de cárcel y tras cumplir 11 años de condena ahora está en libertad gracias a los permisos penitenciarios que le corresponden.

Lo que dice la familia

Familiares de las víctimas critican que nadie les ha informado de que la delincuente había salido de prisión y aseguran sentirse atemorizados.

Dídac, el nieto de una de las ancianas ha explicado, en El Programa de Ana Rosa, que es “indignante” porque no hace ni 11 años del asesinato y hace pocos días se la encontró paseando por la calle. Ha contado que ella no lo reconoció pero que él nunca va a olvidar su mirada, pase el tiempo que pase.

“No te lo acabas de creer, me parece increíble”, decía. Además ha criticado que ninguna de las familias ha recibido indemnización económica alguna por parte de la encausada porque se declaró insolvente. Él sobre todo siente rabia porque nadie los ha avisado de que esto podía pasar y les resulta muy violento encontrarse con ella.

En estos casos, a menos que exista una orden de alejamiento, a los familiares de las víctimas no se les avisa de que la persona que ha cometido el crimen vaya a salir de permiso.