¿Por qué tantas personas están teniendo pesadillas 'extrañas' estos días? ¿La luna podría ser la explicación?

Los ciclos del sueño están intrínsecamente relacionados con las fases de la luna, y esto puede explicar en parte por qué algunas personas experimentan pesadillas "extrañas" en momentos específicos del mes. Para entender mejor esta conexión, es esencial comprender los diferentes ciclos del sueño y cómo se relacionan con las fases lunares.

El sueño humano pasa por varios ciclos a lo largo de la noche, que incluyen dos tipos principales: el sueño REM (movimiento rápido de los ojos) y el sueño no REM. Estos ciclos se repiten varias veces durante la noche.

1. Sueño no REM: El sueño no REM se divide en tres etapas: ligero, medio y profundo. Durante estas etapas, el cuerpo se relaja gradualmente, la temperatura corporal disminuye y la actividad cerebral se vuelve más lenta.
2. Sueño REM: El sueño REM es la fase en la que ocurren los sueños más vívidos y memorables. En esta etapa, el cerebro se vuelve más activo, y los músculos del cuerpo, con la excepción de los ojos y los músculos respiratorios, quedan temporalmente paralizados.

La relación entre las fases lunares y los ciclos del sueño se manifiesta de la siguiente manera:

Luna nueva: El comienzo de los sueños intrigantes

La fase de la Luna Nueva marca el inicio de un ciclo lunar y se caracteriza por una mayor actividad onírica. Durante esta fase, los sueños pueden ser más intensos y vívidos. Se ha observado que las personas tienden a experimentar microdespertares con mayor frecuencia, lo que resulta en un sueño más ligero. Algunos incluso se despiertan en mitad de la noche y les cuesta volver a conciliar el sueño. Sin embargo, esta interrupción del sueño no necesariamente se traduce en un rendimiento deficiente durante el día.

Los sueños durante la luna nueva a menudo están relacionados con nuevos comienzos, proyectos, cambios de trabajo, embarazos y otros eventos que simbolizan el inicio de algo nuevo en la vida de una persona.

Luna creciente: energía y descanso

La fase de la Luna creciente sigue a la Luna Nueva y se asocia con la consolidación y el fortalecimiento de las iniciativas comenzadas previamente. Durante esta fase, las personas suelen experimentar un mejor sueño y un mayor confort. La luz lunar es más brillante, lo que aumenta la producción de melatonina, una hormona que regula nuestros ritmos circadianos y promueve una buena higiene del sueño. Además, los sueños durante esta fase tienden a ser positivos, motivadores y alegres, lo que contribuye a un descanso reparador.

Luna llena: pesadillas y ambigüedad emocional

La Luna Llena ha sido históricamente asociada con fenómenos como la leyenda del hombre-lobo y el aumento de la violencia animal, así como con mayores tasas de ingresos psiquiátricos. Sin embargo, en la música y el arte, se ha relacionado más con el amor y la pasión. Esta fase lunar puede provocar inquietud, nerviosismo y cansancio en algunas personas, lo que se traduce en un sueño más ligero y perturbado. Durante la Luna Llena, es común experimentar pesadillas que reflejan nuestros miedos emocionales, problemas de pareja, conflictos laborales y preocupaciones sobre el futuro.

Luna menguante: El sueño profundo y la creatividad

La fase de la Luna Menguante se encuentra entre la Luna Llena y la Luna Nueva y se asocia con un sueño profundo y reparador. Durante esta etapa, es más probable que las personas disfruten de un sueño ininterrumpido y pasen más tiempo durmiendo. Los sueños que se experimentan en esta fase tienden a ser abstractos, artísticos e imaginativos, alejados de la realidad. Esta fase ofrece la oportunidad de aprovechar un descanso más profundo y rejuvenecedor.