Atento a las consecuencias de retrasar la jubilación
La edad de jubilación en España subió en enero a los 66 años y dos meses...y amenaza con seguir haciéndolo en los próximos tiempos. La falta de soluciones a los problemas económicos del país deriva en seguir prolongando los problemas estructurales que existen y alargar una agonía inevitable de momento, también en el terreno laboral. Sueldos y pensiones se retroalimentar pero la hucha de las pensiones cada vez está más vacía ante los problemas de empleo y la persistencia de salarios robustos y consolidados. Retrasar la edad de jubilación es una opción, pero puede tener ciertas consecuencias ¿Cuáles? Aquí os las exponemos.
La Fundación de Estudios de Economía Aplicada (Fedea) advierte que atrasar la salida del mercado laboral puede aumentar el riesgo de morir antes de cobrar la pensión. Fedea considera que por cada año que se prolonga la edad natural de jubilación existe un riesgo de morir entre 3,2 y 6,6 puntos porcentuales en función de la labor que se desempeñe. No es lo mismo trabajar en una oficina que hacerlo a pie de obra en la construcción, por ejemplo.
Reconocimiento laboral y éxito
El análisis se fija en otras variables que pueden incidir en el efecto perjudicial de retrasar la jubilación: la carga física y psicosocial, la autovaloración en el trabajo y el nivel de cualificación profesional. Más allá del desgaste físico que te suponga tu trabajo, estar bien valorado y que te guste tu trabajo también ayudaría a no aumentar las opciones de muerte entre los 60 y 69 años a pesar de aumentar la edad de jubilación, ya que el reconocimiento laboral y la sensación de éxito son sensaciones positivas que fortalecen el cerebro y contrarrestan el cansancio y el dolor físico, aunque unas sensaciones adversas en dicho terreno podrían multiplicar los efectos negativos y acelerar aún más el riesgo de muerte.
Es por ello que desde la Fundación de Estudios de Economía Aplicada lo que se recomienda es emplear un sistema mixto de jubilación, facilitando mecanismos de jubilación parcial y reducción de horas a partir de cierta edad, combinando la jubilación flexible con el aumento de la edad legal de jubilación y permitiendo una jubilación anticipada en los sectores agotadores física o mentalmente.
Sus estudios demuestran que el riesgo de mortalidad se reduce ostensiblemente en los trabajadores que cuentan con estas opciones y sirven para incentivar su permanencia en el mercado laboral sin que afecta a la salud y repercuta en la economía global del país.
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