El Labradores, 'tienda' de dulces de convento en el Puente de la Inmaculada

El Real Círculo de Labradores ha decidido arrimar el hombro a las órdenes religiosas de la provincia de Sevilla y ayudarles a vender los dulces que fabrican en sus conventos. Desde el viernes 5 hasta el martes 8 de diciembre, festividad de la Inmaculada Concepción, ha convertido en tienda sus dos sedes de la capital andaluza. La deportiva (Juan Sebastián Elcano, 1) y la institucional (Pedro Caravaca, 1). El horario es de 12:00 a 17:00. El martes 8 sólo abrirá la sede del centro de la ciudad, acaparando la afluencia de clientes.

Los productos conventuales disponibles son variados. Desde la mermelada de naranja a las tortas de Álcala, pasando por el turrón de chocolate o los cortadillos de cabello de ángel. Más de una veintena de dulces manjares con unos precios que oscilan entre los 4 y los 10 euros. Los beneficios irán a parar íntegros a la órdenes religiosas, siendo estos fundamentales para la supervivencia de estas congregaciones.

Cándida de la Banda, delegada de Relaciones Institucionales del club hispalense, es la cabeza visible de este proyecto, que "ha tenido una acogida magnífica" en sus primeros días. "Se ha agotado todo lo que ofrecimos y hemos tenido que reponer", explica De la Banda, que ha contado el grupo de voluntarios Los 300 para llevar la iniciativa solidaria a cabo. Las fechas prenavideñas, idóneas para la compra de estos dulces, unida a las restricciones sanitarias y el cierre perimetral, ha hecho que el público haya acudido en masa a ayudar a las comunidades religiosas. "Queremos aportar nuestro granito de arena a la sociedad", añade la delegada, que hace hincapié en que no son "sólo un club para los socios".