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Este espacio comercial al aire libre, a los pies del rascacielo sevillano, cuenta con 12.000 metros cuadrados verdes que actúan como aislante térmico y contribuyen al ahorro energético del edificio. Asimismo, están dotados de un sistema de captación de agua de lluvia que permiten regar todas las cubiertas ajardinadas con el 100% de agua reciclada.
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Estas cubiertas vegetales cuentan con caminos marcados favorecer el trabajo de los jardineros, que se afanan diariamente porque luzcan en perfecto estado. En esta imagen se puede apreciar la variada flora con que cuenta este lugar.
A los pies de la Torre Sevilla se distribuyen plantas de todo tipo. Una de ellas es la adelfa, que destaca por sus flores de tonos rosados. También es conocida como laurel de flor, rosa laurel, baladre o trinitaria.
Chamaerops humilis es su nombre científico, pero se le conoce popularmente como palmito o palmera enana. En las cubiertas vegetales del centro comercial hay una zona en la que son las protagonistas.
La propia actividad de las especies vegetales reduce el dióxido que se emite a la atmósfera disminuyendo la contaminación del aire. Las matas, palmeras, arbustos y árboles plantados cumplen esta función diariamente.
El jardín del techo del Centro Comercial Torre de Sevilla, aparte de ser un enclave singular, es un magnífico mirador al resto de la ciudad. Desde él, se puede observar la otra orilla de la dársena del Guadalquivir, así como el resto de la Isla de la Cartuja.
La forma de su inflorescencia ha hecho que al callistemon se le conozca así. También se le conoce como calistemo o cepillo. Es originario de Australia, pero en este punto de la Cartuja se puede disfrutar de sus colores.
Así se conoce a la Cycas revoluta. Una planta procedente del sur de Japón que también está presente en este variopinto jardín. Son varias las hileras de falsas palmeras las que se disponen en esta cubierta vegetal.
Los jardines sobre el Centro Comercial Torre Sevilla contrastan con el resto de parques y zonas verdes de Sevilla. Empezando por el vecino Parque Magallanes y terminando por los cada vez más habituales jardines verticales en restaurantes y hoteles de la capital andaluza.
Las cubiertas vegetales del espacio comercial no sólo se pueden relacionar con la imponente Torre Sevilla. Su cercanía con otra construcción que rompe el skyline de la zona, la Torre Schindler, la permiten asociar con el que fuera Pabellón de la Navegación durante la Exposición Universal de 1992.
La política medioambiental del C. C. Torre Sevilla tiene como objetivo el desarrollo de energías limpias y el respeto por el medioambiente en relación a su entorno. Y, por tanto, en relación a la sociedad en la que se ubica.
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