Fibes ha anunciado este viernes el segundo musical que ha programado en esta temporada, uno de los géneros con mayor éxito de público. Se trata de un clásico El guardaespaldas, basado en la popular película de Lawrence Kasdan y protagonizada por Kevin Costner y Whitney Houston. Serán siete funciones, del 19 al 23 de febrero, en las que la productora Letsgo pretende agotar los billetes. Los protagonistas del musical son caras muy televisivas, como Chanel Terrero y Octavi Pujades, aquejado de gripe y que excusó su asistencia al acto.

El espectáculo, con una veintena de artistas en escena, está dirigido por Federico Bellone, que destaca por musicales como Ghost, Dirty Dancing (el primero programado en enero de este año en Fibes) o Mary Poppins. Y está producido por Letsgo, que ha traído a la caital espectáculos como la saga The Hole o el citado Dirty Dancing o La Familia Adams. La gira de este nuevo musical ya ha pasado por Valencia, Córdoba y Málaga y seguirá por otras ocho ciudades, incluida Sevilla. 

La programación de estos musicales confirma la entrada de Fibes en la agenda cultural de la ciudad y la especialización de este escenario en este tio de espectáculos. Tal y como adelantó este periódico, la estdimación de ingresos de esta faceta cultural de Fibes es de 3,3 millones de euros al año, lo que supone el 23% de los ingresos totales por actividades, que este año superarán los 14 millones de euros, según datos municipales. 

Según ha confirmado el delegado de Cultura, Antonio Muñoz, este año hay ya cerrados unos veinte espectáculos, entre los que destacan próximamente una obra de teatro protagonizada por Ricardo Darín y Andrea Pietra, Escena de la vida conyugal. 

También están previstos ya un concierto de natalia Lacunza, que en media hora ha vendido ya más de 2.000 entradas, un homenaje al rock andaluz, el espectáculo La otra orilla de Ainhoa Arteta, un ocncierto de El Arrebato, a punto de colgar ya el  no hay billetes, y un concierto de la Real Orquesta Sinfónica.

Según Antonio Muñoz, habrá más sorpresas que no quiso adelantar por motivos de confidencialidad y apuntó el deseo de programar un gran concierto de carácter internacional, al estilo del de Bob Dylan.