Kirksay es el alero que cierra la plantilla

Andaba el Cajasol rastreando el mercado en busca de un alero con el que completar la plantilla, y ya lo ha encontrado. El último fichaje del equipo tenía que ajustarse a un perfil determinado exigido por Plaza para que completase lo que ya hay, además de ceñirse a ciertos parámetros económicos, y el elegido es el francés de origen norteamericano Tariq Kirksay.

Máximo reboteador de la ULEB hace dos temporadas (más de 10 por partido de media), el año pasado jugó en Rusia, en el Unics Kazan, disputando 23 partidos, con 5,5 rebotes de media y 7,3 puntos por encuentro. En la Eurocup sus números fueron incluso mejores: 12,9 puntos y 7,8 rebotes de media. Sin duda es lo que buscaba el Cajasol para completar su rotación, ya que recluta a un jugador experimentado (la semana que viene cumple 30 años), capaz de bregar con otros aleros altos (1,99 metros y 95 kilos de peso), con un tremendo potencial reboteador no exento, además, de un decente tiro exterior, pese a que no se prodiga en exceso.

Su paso por la Universidad de IOA (1996-2000) se saldó con diversas elecciones en los drafts de ligas comerciales americanas, como la CBA, la IBL , la ABA o la USBL, aunque la primera experiencia en Europa la tuvo en Macedonia, al ser contratado por el Rabotnicki Skopje. Pasó por Venezuela, donde se erigió en un auténtico ídolo, para cruzar el charco rumbo a Francia para fichar por el BC Besancon de la France Pro B. En la 2003-2004 da el salto a la máxima categoría del baloncesto galo en las filas del Bourg-en-Bresse, desde donde fue reclutado por el Nancy. Durante las tres campañas que estuvo, promedió más de siete rebotes y 13 puntos por partido.

Si no hay problemas de última hora con los enlaces y vuelos, el jugador se incorporará a finales de la semana con el resto del grupo en la concentración de Puigcerdá, de manera que Joan Plaza dispondrá de todo el equipo, a excepción de Ellis, para preparar la próxima temporada.