"Estamos hablando discretamente sobre la materia y el secretario general de Políticas Culturales, Bartolomé Ruiz, viene trabajando en ello desde hace varios días". Con estas palabras explicó ayer el consejero de Cultura, Paulino Plata, la contribución que su departamento está realizando para resolver el conflicto del Centro Guerrero.

O lo que es lo mismo, una vez roto el matrimonio entre la familia Guerrero y la Diputación de Granada, parece que la Junta está dispuesta a poner un poco de cordura y sensatez para evitar que el ente provincial cumpla a lo largo de la jornada de hoy su advertencia de embalar y enviar los 60 cuadros del artista a un almacén de Madrid especializado en obras de arte.

Y eso que el delegado de la Consejería de Cultura en Granada, Pedro Benzal, aseguró el pasado sábado que la Junta no pintaba nada en las negociaciones que han estado llevando a cabo la Diputación con la familia de José Guerrero para evitar que la obra del pintor granadino se marchase de la ciudad, de modo que rehusó intervenir en el proceso. Porque el conflicto, dijo Benzal, es estrictamente "un asunto de ciudad", y es la Diputación, o también incluso el Ayuntamiento, quienes tienen que hacer las propuestas oportunas a los herederos del artista, considerado uno de los máximos exponentes del expresionismo abstracto.

Ahora, después de que el Ayuntamiento haya ofrecido a la familia tres salas del Centro Manuel de Falla -que abrirá sus puertas el próximo día 30 tras ser reformado- para exponer el legado del pintor, Plata afirma que "no quiere distorsionar sino contribuir" a que se arregle la situación, de modo que se pueda rebajar la tensión de los últimos días y evitar así que la obra del artista abandone su ciudad.

Sin embargo, ante el anuncio de la familia Guerrero de cerrar la negociación con la Diputación -que les dio de plazo hasta el día de hoy para elegir entre crear una fundación con el nombre del artista (en un caso pública y en otro privada)- y de mantener la mano tendida a las instituciones que le ofrezcan la permanencia de la obra con "estabilidad y autonomía", Plata ha rehusado valorar la posibilidad de que la Junta pudiera adherirse a un proyecto conjunto y hacer una aportación económica para su puesta en marcha. Al respecto, explicó que no quiere decir nada más, porque no cree que sea bueno "desarrollar las conversaciones a través de los medios".

Aunque hoy expira el plazo dado por la Diputación granadina a la familia para decidir el futuro del Centro, la institución provincial encara "con optimismo" el final del plazo para aclarar el destino de la obra del pintor, que por ahora se expone en el inmueble de la calle Oficios que lleva su nombre en la capital granadina.