El Grupo Socialista del Parlamento de Andalucía rechaza el nuevo sistema de financiación aprobado por la Junta para la atención de los niños de cero a 6 años que sufren alguna discapacidad o trastorno en el desarrollo. Francisco José Vargas, portavoz del PSOE en la Comisión de Salud del Parlamento, confirmó este miércoles a este medio que su grupo se unirá a la Proposición No de Ley (PNL) que la semana pasada firmaron de forma conjunta los cuatro grupos de la oposición (Partido Popular, Izquierda Unida, Podemos y Ciudadanos) para la retirada de acuerdo marco. De este modo, el Parlamento al completo se enfrenta al Gobierno andaluz, que ni siquiera cuenta con el apoyo de su grupo, algo infrecuente en la historia de la democracia.

La Plataforma de Atención Temprana de Andalucía, impulsada por el sevillano Antonio Guerrero, abuelo de un niño de 3 años que sufre trastorno específico del lenguaje (TEL), comenzó en junio una cruzada contra el nuevo plan de financiación de los Centros de Atención Infantil Temprana (CAIT), que atienden en la provincia a unos 4.500 menores de 0 a 6 años -más de 17.500 en toda Andalucía- que padecen alguna discapacidad, además de parálisis cerebral, espina bífida, asperger, síndrome de Down y retraso madurativo, entre otros trastornos del desarrollo. Este acuerdo marco establece que todos los CAIT que quieran seguir en el sistema deberán adherirse a un modelo de conciertos con unas condiciones económicas "inasumibles" e "insostenibles", según califican desde la plataforma. Además, con este plan, el Servicio Andaluz de Salud (SAS) deriva la atención de los niños de 4 a 6 años a Educación, pasando a ser una responsabilidad de los colegios públicos.

Desde la plataforma denuncian que los centros educativos no cuentan con suficientes profesiones especializados para tratar a estos menores y reclaman que éstos sean competencia exclusiva del SAS y no de Educación. En este sentido, Antonio Guerrero apunta a que el periodo de los 4 y los 6 años resulta "crítico", ya que se produce lo que los especialistas llaman una "poda cerebral": "Aquello que el cerebro no ha usado o infrautilizado o no se ha estimulado desde el nacimiento del niño, el cerebro lo elimina sin más, y los daños son permanentes", aclara el sevillano.

En este sentido, y tras varias reuniones, los cuatro grupos de la oposición en el Parlamento presentaron de forma conjunta el pasado jueves una PNL donde pedían la retirada del acuerdo marco y el inicio de un proceso participativo en el que colaboren interlocutores sociales y profesionales del sector para la elaboración de un nuevo modelo para la Atención Temprana en Andalucía. Además, exigían el abono "inmediato" de la deuda que la Junta mantiene con los 169 centros de Atención Temprana, 35 de ellos en Sevilla. Esta derrama, según la plataforma ciudadana, asciende a 2,7 millones de euros en la provincia de Sevilla.

El portavoz del Grupo Socialista en la Comisión de Salud del Parlamento asegura que el PSOE reclamará "un aumento y mejora de las prestaciones" que reciben los CAIT y firmará a final de mes una nueva PNL junto al resto de partidos. En este sentido, la oposición ya ha acordado que retirará el documento que presentó la semana pasada para que sólo se tramite un único texto con la firma de los cinco partidos políticos.

Vargas indica que el PSOE no se unió a la primera firma con el resto de grupos por un "malentendido", ya que "no tenía constancia" de estas actuaciones ni de los numerosos correos electrónicos que la plataforma liderada por Antonio Guerrero dice haber enviado a diferentes representantes del PSOE informando sobre la "precaria" situación de los Centros de Atención Infantil Temprana.

El centro de Estimulación Precoz de la Hermandad del Buen Fin -al igual que ya hicieron Asedown y la Asociación Sevillana de Síndrome de Asperger- ha sido el último en denunciar los recortes de la Junta. En esta unidad, que cuenta con 12 terapeutas, se atiende a unos 350 niños. La hermandad tenía previsto trasladar el centro a las antiguas dependencias del convento de San Antonio para duplicar su capacidad pero, tras cambiar el sistema de subvención, el proyecto queda en el aire, según confirman fuentes del Buen Fin.

La denuncia de esta hermandad ha hecho que el portavoz del PP en el Ayuntamiento de Sevilla, Juan Ignacio Zoido, se posicione al respecto, pidiendo al alcalde, Juan Espadas, que medie para que la Administración autonómica continúe colaborando con este centro y que desde el Consistorio se haga todo cuanto sea posible para que este proyecto no corra peligro. "Antes de septiembre deben tener todas las dudas resueltas para que el centro ponga en marcha el nuevo curso con las mismas prestaciones, puesto que, además, son varios los puestos de trabajo que dependen de dicha subvención", señala Zoido.

El ex alcalde recuerda que "desde este centro realizan una gran labor social, ya que ofrecen servicio gratuito y especializado a menores con alguna discapacidad que no pueden asistir a una consulta privada, así como atención a sus familias": "Todos debemos aunar nuestros esfuerzos para que proyectos de este calado social sigan adelante y puedan ayudar al mayor número de niños posible", apunta, uniéndose así a las voces en contra del nuevo plan de la Junta