La petición de ayuda que Monteseirín trasladó al consejero de Gobernación, Luis Pizarro, la pasada semana para salvar de la quiebra a Tussam figuró ayer también en el orden del día de la reunión que el alcalde mantuvo con Rosa Aguilar, quien se comprometió a atender el SOS municipal y dar "una respuesta constructiva" a la solicitud de financiación autonómica de la empresa de transportes urbanos hispalense. "Obras Públicas analizará con rigor, profundidad y buena voluntad esta petición municipal porque reconoce el esfuerzo adicional que afronta el Ayuntamiento de Sevilla para prestar un servicio de transporte público de excelencia y calidad con un precio adecuado", apostilló. El alcalde, además, espera celebrar la próxima semana una reunión con la Secretaría de Estado de Transportes del Ministerio de Fomento al objeto de recabar también el apoyo del Gobierno central en la financiación de Tussam.

Rosa Aguilar recibió ayer de manos del alcalde un documento realizado por técnicos municipales en los que compara el sistema de financiación de los transportes públicos de las áreas metropolitanas de Sevilla, Madrid y Barcelona. Monteseirín destacó que la empresa de transportes urbanos de Sevilla es "la única de las tres en la que sólo paga el Ayuntamiento, mientras las de Madrid y Barcelona perciben transferencias y aportaciones públicas municipales, de la correspondiente comunidad autónoma y también estatal".

En las tres capitales comparadas, el coste del servicio es asumido por el usuario por debajo del 50%, y el resto compensado por las administraciones públicas. En Sevilla, los viajeros cubren el 40% del coste del billete y el Consistorio compensa el 60% restante en solitario. La aportación municipal a Tussam en 2009 supera los 81,3 millones de euros -20 millones más que en 2008-, entre transferencias corrientes (46,3 millones), subvenciones a títulos de viaje (10,7), transferencias de capital (5,9) y transferencias al Metrocentro (18,3 millones). La deuda acumulada a final de 2008 supera los 110,7 millones de euros (45,5 millones por inversiones y 65,2 para atender necesidades de gasto corriente). Este año se prevén 58,7 millones de pérdidas.

El alcalde concluye en el documento que la financiación de Tussam se debe acometer a través de un contrato programa financiado de forma combinada por las diferentes administraciones para garantizar la estabilidad económica de la empresa. Madrid, por ejemplo, percibe aportaciones estatales y autonómicas en función de los viajeros transportados (las administraciones cubren el 58% de las necesidades de financiación en una proporción de seis partes la Comunidad de Madrid, dos el Estado y dos el Ayuntamiento). En Barcelona, en cambio, las administraciones subvencionan en función de los kilómetros recorridos el 56% de las necesidades reales de financiación frente al 43% de recaudación por venta de títulos y otros ingresos. En la capital catalana, la aportación pública es: Generalitat de Cataluña (46%), Estado (25%), Ayuntamiento de Barcelona (15%) y resto de municipios de la Corona (14%).