Cuando se cierra una puerta, una ventana se abre. Así han interpretado los rectores del Cajasol Voley la actual situación y si hace unas semanas decidían no inscribir al equipo masculino en la Superliga tras siete exitosas campañas, ayer se hizo oficial la noticia que este periódico ya apuntó el miércoles: habrá equipo en la Superliga Iberdrola.

El conjunto nazareno se proclamó la pasada temporada campeón de Segunda Nacional y aspiraba a jugar en la Superliga 2, a expensas de las vacantes que hubiera. Sin embargo, la buena trayectoria de la entidad los últimos años, haciendo sólidos proyectos en los que jóvenes jugadores daban el salto a conjuntos de mayor envergadura, y el trabajo de cantera valieron para contar con la confianza de la Federación Española, que el pasado día 19 confirmó al club su plaza para jugar en la máxima categoría del voleibol nacional femenino.

Una vez más, la entidad sevillana se reinventa, pero en esta ocasión en vez de dar un paso adelante lo hace dando uno al lado para iniciar una nueva aventura. Este verano casi toda la plantilla del equipo masculino cambió de aires. Óscar Prades regresó al Mediterráneo; Jesús Bruque y Paco Fernández ficharon por el conjunto francés del Martigues; Cabrera y Jovanovic se fueron al Teruel; Nassini, al CV Melilla... Otra vez había que hacer un bloque desde cero, por lo que sacar un equipo en la élite se hizo inviable.

Por ello llegó el momento de apostar por la cantera. Así lo apunta el Cajasol Voley en una nota, en la que destaca que "la gran cantidad de deportistas femeninas existentes en Andalucía y especialmente en la provincia de Sevilla, fruto del magnífico trabajo de los innumerables clubes existentes, sin olvidar la cantera del propio club, que en último año obtuvo éxitos como el subcampeonato de España alevín, la tercera posición en el Andaluz de la misma categoría; el octavo puesto en el Campeonato de Andalucía cadete o el sexto lugar de las juveniles en el Andaluz", además del primer puesto en la Segunda Nacional femenina, conjunto cuyo bloque será el que computa la próxima campaña en la Superliga.

Con la renovación de todos los apoyos y patrocinios del pasado curso, desde el Ayuntamiento de Dos Hermanas a la Fundación Cajasol como principales colaboradores, la nueva aventura coge forma. El conjunto nazareno cuenta con una buena base y ya se mira en el mercado para reforzar la plantilla y superar un primer año tan ilusionante como complicado por el reto que supone ser el único equipo andaluz en la máxima categoría del voleibol nacional.