Aguilar blindará El Algarrobico con su integración en el parque natural
La ministra de Medio Ambiente quiere que la playa de Carboneras, sobre la que levanta la mole del hotel, sea "un espacio libre para el disfrute de todas las personas"
Las administraciones central y autonómica estrechan cada vez más el cerco a El Algarrobico con el objetivo de blindar el paraje en el que aún se levanta la mole de la estructura del hotel cuya construcción fue suspendida por la justicia. Ahora ha sido la ministra de Medio Ambiente, Rosa Aguilar, la que se ha mostrado partidaria de salvaguardar la zona de cualquier actuación urbanística perniciosa.
Así, la titular de Medio Ambiente está dispuesta a negociar con la Junta para que el espacio sobre el que se levanta la construcción hotelera, en el término municipal de Carboneras (Almería) -y sujeto a una orden de demolición desde hace cuatro años-, quede integrado en el parque natural Cabo de Gata-Níjar "para disfrute de todas las personas, es decir, un espacio libre de El Algarrobico", subrayó Aguilar.
No obstante, la ministra dejó muy claro que en su departamento no existe una política de demoliciones en el litoral, sino una Ley de Costas que hay que cumplir. "Tenemos ejecutados los deslindes en un 93% de los 8.000 kilómetros de costa que tenemos en España", recordó Aguilar, quien adelantó que la intención del Gobierno es "llegar al cien por cien, y sabemos que hay temas sensibles a los que, desde el diálogo y aplicando la legalidad, daremos respuesta", explicó la ex consejera de Obras Públicas. Precisamente el consejero de Medio Ambiente, José Juan Díaz Trillo, reveló el día anterior en el Parlamento que le "gustaría derribar" el hotel, al tiempo que señaló que no sabe si el futuro decreto de parques naturales "va a proteger más, pero desde luego, menos no".
Por otra parte, el coordinador general de IU-CA, Diego Valderas, incluyó ayer la demolición del hotel El Algarrobico en un paquete de medidas vitales para el desarrollo medioambiental en la comunidad. Junto al problema de la playa de Carboneras, Valderas enumeró las balsas de fosfoyesos en Huelva, la aplicación de la Ley de Costas, la delimitación del espacio marítimo-terrestre del Parque de Doñana, la protección y conservación del río Guadalquivir, la finalización de la red de depuración de aguas, el "pronunciamiento desfavorable" al oleoducto de Balboa, una nueva política en el tratamiento de aguas residuales o el Plan de Regadío del entorno de Doñana. "Hay que ejercer un mayor control", exigió el líder de la formación de izquierdas.
No hay comentarios