El ex directivo de Invercaria Juan María González Mejías, sobrino del ex presidente del Gobierno Felipe González, negó ayer que durante el tiempo que estuvo empleado en la sociedad de capital riesgo de Andalucía fuese un trabajador "intruso o fantasma", tal y como aseguró el Grupo de Blanqueo de Capitales de la Policía Nacional en un informe en el que aseguraba que se le debía considerar de esta forma porque "constando formalmente como trabajador dado de alta en la Seguridad Social, en realidad no presta servicio de forma efectiva" en esta empresa pública de la Junta.

Tras declarar en calidad de imputado ante el juez de Instrucción número 16 de Sevilla, que investiga las presuntas irregularidades en Invercaria, González Mejías negó tajantemente a los periodistas que sea un trabajador intruso o fantasma en los 20 años que lleva trabajando. "Ni en mis 12 años en el sector privado ni en mis ocho años de experiencia en el sector público he cobrado cantidad alguna por la que no haya trabajado", aseguró.

González Mejías precisó que el hecho de que formalmente su contrato estuviera en Invercaria y prestara servicio en el Observatorio de Innovación "es una práctica validada por una sentencia del Tribunal de Cuentas que está aportada a la causa". El ex directivo imputado también señaló que "todos los anticipos de nóminas" que ha recibido a lo largo del tiempo que ha prestado servicio en Invercaria los ha "satisfecho en tiempo y forma y conforme a derecho".

Por su parte, el abogado Miguel Ángel Millán, que representa al imputado, explicó que su cliente dejó "claro" ante el juez que no ha habido ningún trabajador fantasma en Invercaria, por cuanto la cuestión está "perfectamente demostrada y sentenciada por el Tribunal de Cuentas y la Cámara de Cuentas de Andalucía, por cuanto el señor González y otros trabajadores de Invercaria ejercieron su labor en el Observatorio de Empresas".

Sobre la duplicidad de cargos directivos en Invercaria el abogado dijo que no era tampoco nada inusual, por cuanto en esta sociedad pública había dos directores de Promoción y seis directores de Inversión porque "tenían unas funciones ejecutivas totalmente distintas". Su cliente no desempeñaba su labor dentro de Invercaria sino en el Observatorio, por lo que se trata de "una categoría profesional y no un puesto directivo, entre otras cosas porque él es un empleado de Invercaria y no es cargo directivo hasta 2010, pero no en 2005/2007".