19-J

Elecciones Andalucía: A la caza del voto del empleo joven

  • Espadas promete la creación de 100.000 empleos para jóvenes durante los próximos cuatro años

  • Núñez Feijóo también apuesta por un refuerzo de la formación profesional

  • Los candidatos se encomiendan a la Virgen

Juan Espadas, en una gala homenaje a los pioneros del kárate en Sevilla.

Juan Espadas, en una gala homenaje a los pioneros del kárate en Sevilla.

En Andalucía hay 1,7 millones de personas de entre 18 y 35 años. Un colectivo que tiene que afrontar las consecuencias de la crisis derivada de la pandemia y agravada por la invasión de Ucrania, que en muchos casos tuvo que lidiar con la debacle provocada por la crisis financiera. Lastrado por el paro y la precariedad laboral, que en tramos como el que va de los 16 a los 24 años alcanza una tasa del 40% de desempleados, muy por encima de la media no solo europea, sino también nacional. Un problema de primera magnitud que en la previa y primeros compases de la campaña se ha convertido en uno de los temas más abordados por los partidos.

Más de 1,7 millones de electores (el 26% del censo) esperan una respuesta. Ellos y sus padres. Según el último estudio del Centro de Investigaciones Sociológicas, el primer problema para los andaluces es (sigue siendo) el paro. Los grandes partidos lo saben y en plena precampaña han sacado su artillería institucional: la Junta anunciaba a unos días de la campaña un refuerzo de la formación profesional como fórmula para buscar una mayor inserción laboral y días después aprovechaba para aprobar una oferta de estabilización de empleo público de 9.100 plazas. El Gobierno no se ha quedado atrás: el Consejo de Ministros aprobaba el pasado martes un plan de 50 millones de euros para luchar contra el paro en Andalucía. Toda la carne en el asador del empleo, aprovechada por los respectivos candidatos.

Espadas es hasta ahora el que ha enarbolado con más fuerza esa bandera, en la que tiene para esgrimir el efecto de la reforma laboral aprobada por el Gobierno central y su efecto en la reducción de la temporalidad en los nuevos contratos. En la presentación de su programa electoral, las medidas que destacó fue su compromiso de reducir a la mitad la tasa de paro y la ejecución de un plan de 2.000 millones de euros para impulsar el empleo juvenil. Y este sábado ha vuelto a insistir en esa idea, dando un paso más: la promesa de crear 100.000 empleos para jóvenes en los próximos cuatro años.

Las cifras de puestos de trabajo a generar son un arma electoral de doble filo y no están exentas de mal fario: Juanma Moreno prometió crear 600.000 empleos si era presidente y se encontró con una pandemia. José Luis Rodríguez Zapatero comprometió dos millones el mismo año que se desató la crisis financiera. Pese a ello, Espadas no ha dudado esta mañana en prometer esos 100.000 empleos en el mandato gracias al plan de los 2.000 millones de euros, a ejecutar entre la iniciativa pública y privada, mediante la formación especializada de esos jóvenes. “Las empresas nos demandan a las administraciones que formemos a nuestros jóvenes y poder facilitar así la inserción en el mundo laboral”, ha destacado.

El presidente del PP nacional, Alberto Núñez Feijóo, también se ha subido al carro del empleo y la formación desde Granada. “Se ha acreditado que ocho millones y medio de andaluces, si se ponen a trabajar de forma ordenada, con el compromiso y con la laboriosidad de este pueblo, se pueden convertir en la primera comunidad autónoma de España”, lo que, a su juicio, “sería muy bueno para España” por el peso poblacional de los andaluces. Y para ello ha considerado clave el refuerzo de la formación profesional, con una inserción laboral de “más del 95%”.

Los datos les dan la razón: en Andalucía hay 19.000 puestos de trabajo sin ocupar en sectores donde no hay cualificación necesaria para la inserción. Y la comunidad (también el resto del país) se ha quedado atrás en la FP: en Alemania, un 40% de los jóvenes se matriculan en ella mientras en España sólo optan a ella un 12% de los estudiantes. Pero pese a ello el refuerzo de la formación profesional, en los programas durante años, no termina de llegar. Se abre otro periodo de cuatro años para resolver esa carencia.

Comentar

0 Comentarios

    Más comentarios