El acento andaluz es uno de los acentos más discriminados y objeto de glotofobia en nuestro país. Encontramos este rechazo hacia el acento andaluz en escenarios laborales, de ocio o incluso en las series y películas que consumimos. Para algunos este acento es sinónimo de "hablar mal".

"yo mismo intento forzar el acento para que no se me note ese habla andaluza que tanto es criticada" expresa uno de los sevillanos encuestados, tal como se recoge en el video que acompaña esta información. Existen muchas personas que discriminan otros acentos por considerarlos inferiores o menos válidos. Este sesgo repercute en los estereotipos de los andaluces y promueve una discriminación muchas veces con una base elitista.

Todavía se asocia el tener acento andaluz con ser un cateto/a, con la incultura o con hablar mal. Cuánto nos queda por aprender de nuestra propia historia y de nuestros orígenes.Qué pena.

— Azahara 🦋 (@LaFlorAzahara) November 9, 2022

Voy a ver una serie ambientada en Andalucía. ¿En esta los personajes tendrán acento andaluz o el personaje vuelve a tener un acento castellano impecable? Pq de todos es sabido que los andaluces solo contamos chistes, por eso las series no se pueden rodar con acento andaluz... 🤦🏾‍♀️

— Rocío (@laram5) November 9, 2022

Un repaso de los últimos años, muestra declaraciones como la de Artur Mas en 2011, quien, en el contexto de un debate sobre la inmersión lingüística en Cataluña, declaró que "en Andalucía hablan castellano, pero que a veces no se les entiende". También Ramón Silva, edil socialista madrileño en 2017, lanzó un dardo a Susana Díaz con la frase "Queremo un PZOE ganadó"

Las desigualdades producto del acento andaluz son claramente reconocidas por algunos de los Sevillanos encuestados a pesar de que no sentirse directamente discriminados. Este problema se manifiesta de diversos modos, defendiéndose con un "a veces no se les entiende". Los andaluces son más conscientes de este acentismo y muchos han decidido enorgullecerse de su acento y denunciar estas discriminaciones.