DOS jóvenes que visitan la Basílica del Gran Poder conversan delante del paso del Señor. Se lamentan porque no luce la túnica bordada. Se barruntaba, pero finalmente sale como es costumbre: con la túnica lisa morada. Ellos esperaban poder verlo de otra manera, pero no pierden la esperanza: "A lo mejor es que no han querido ponerle la túnica bordada el mismo año que le han cambiado el manto a la Virgen". Se refieren a que la Dolorosa del Mayor Dolor y Traspaso va vestida con el manto azul que le bordaron en los talleres de Fernández y Enríquez en el año 1991, según un diseño de Garduño. Esta pieza, donada por Manuel Ruiz de Lopera, es de una categoría excepcional, aunque es cierto que su dibujo poco tiene que ver con el palio de Rodríguez Ojeda. En cualquier caso, la Virgen va preciosa. Muy agradecida ha sido la restauración de la imagen de San Juan que ha llevado a cabo Pedro Manzano. Durante la mañana, el duque de Alba visitó la hermandad, donde fue atendido por el director espiritual, don Camilo Olivares, y el hermano mayor, Félix Ríos.

Son las 9:50. En la basílica ya están puestos los carteles organizativos de la cofradía. No se ve ninguna mujer de mantilla a esta hora. En la plaza un camión descarga las sillas para la salida. De camino a la otra basílica, la de la Macarena, se puede comprobar que las calles están todavía vacías. Hay personas corriendo a la vera del río y ciclistas. La cola para ver a la Virgen de la Esperanza ya se alarga por la calle Bécquer. Son las 10:05. "Son apenas las 10:00 y ya hemos visto a la Macarena", comentan las personas de un grupo que sale del templo. Su acento delata que no son sevillanos. Mucho turista hay a esa hora en la Macarena. El Señor de la Sentencia va exornado con unos claveles morados que reproducen el mismo cromatismo del terciopelo de la nueva túnica del Señor. También lleva salpicadas unas siemprevivas del mismo color. La Virgen va igual que en la procesión del pasado 31 de mayo: claveles y jacintos blancos, en las jarras laterales, y minicalas y nardos, en las jarritas delanteras. Además de azahar en la mesa del paso.

Las fotografías delante de los pasos, las ofrendas florales y las visitas protocolaria se suceden. Alguien comenta que la hermandad no irá en manifestación, como el año pasado. Aquí sí se ven muchas más mantillas, las primeras las de las propias hermanas que se encargan de poner el clásico lazo verde a los visitantes. De la Virgen de la Esperanza poco hay que decir: sublime y elegante, como siempre. Por cierto, la hermandad informaba a través de su página web que 3.496 personas componían el cortejo para la Madrugada, y sin contar los miembros de la banda de música del Carmen de Salteras que acompaña a la Virgen.

A la 10:44 el arzobispo de Sevilla, monseñor Asenjo, habla a los hermanos que allí se congregan: "Que vuestra estación de penitencia sea una verdadera gracia actual que os ayude a ser mejores cristianos". El prelado ha procurado este año visitar, como suele hacer, todas las hermandades por la mañana antes de su salida procesional. Sólo dejó de hacerlo le Martes Santo, que oficia la misa crismal en la Catedral. También se suceden aquí las visitas. Además de detenerse en los dos pasos de la cofradía, muchos se acercan al lugar donde están depositadas las cenizas de la duquesa de Alba, gran benefactora de la hermandad.

El número de mantillas va aumentando conforme pasa la mañana. A las 11:10, en Triana, se cuentan por decenas. La cola para visitar la Capilla de los Marineros se extiende hacia el Altozano, quedándose en el número 11 de Pureza. Una de las informaciones más demandadas de este día es el exorno de los pasos de la Esperanza. El del Señor de las Tres Caídas es a base de rosas, chrysanthemum, ageratum y limonium. El de la Virgen está compuesto por: delphinium, lysiantum, jazmín, flor de cera, orquídeas symbodium y alhelíes. Destaca en el paso de la Dolorosa que tiende la mano la recuperación de las flores de cera en las esquinas. A las 11:30, el coro canta delante de la Virgen. "Las Fallas molan, pero esto es una flipá", le espeta un señor vestido con chándal y acento de más allá de Despeñaperros a uno de los guardias de seguridad. La salida de la capilla es por la tienda de recuerdos, donde ya se venden las invitaciones para la cena del pescaíto y donde se vende Pureza de parfum, by woman30, además del merchandising cofradiero de rigor.

A la hora del ángelus, las colas se mezclan en la Parroquia de la Magdalena para visitar a la Quinta Angustia, que sale por la tarde; y al Calvario, que lo hace de madrugada. Hay un gran revuelo en el interior del templo, donde ya está el altar preparado para los oficios de la tarde. Las mantillas siguen aumentado. También hay cola para acceder a la capilla de Montserrat, o Monserrat, como dice la placa municipal que hay en la fachada.

La cola para ver a la Primitiva Hermandad de los Nazarenos de Sevilla, que celebra el IV centenerio del Voto Concepcionista, remonta desde Alfonso XII hasta la calle El Silencio. Hay grupos de muchachas con mantilla, y hermanos que comentan cómo la mitad del cortejo formará este año en unas dependencias anexas, propiedad de El Corte Inglés, que han sido adecentadas y adornadas para la ocasión.