Hay ciertos alimentos que una gran parte de la población cree que son una verdura pero en realidad se tratan de una fruta. Algunos ejemplos de ello son el aguacate, que actualmente se encuentra muy de moda tanto por los beneficios que presenta como por la versatilidad con la que puede añadirse a nuestros platos, el tomate o el pimento, aunque también se encuentra otro que igualmente hay que mencionar por la cantidad de nutrientes que nos aporta.

Se trata del calabacín, que podríamos creer que es una verdura pero que, botánicamente hablando, se trata de una fruta. Aunque este alimento, más que por la 'confusión' que puede haber por el tipo de alimento que es, debe destacar por los beneficios que aporta su ingesta, que son muchos debido a las propiedades que presenta.

Este alimento es rico en vitaminas del grupo B, en la K y en la C. Un solo calabacín podría aportarnos el 60% de la cantidad de este último nutriente que requiere diariamente nuestro cuerpo. En cuanto a los minerales, en la fruta encontramos tres que son fundamentales para la salud de nuestros huesos: calcio, magnesio y fósforo.

También proporciona hierro y potasio, que además de a dormir mejor, ayudará a reducir las posibilidades de padecer una enfermedad relacionada con el corazón.

Otro de los puntos a favor de esta fruta es que contiene propiedades antioxidantes, que combatirán contra los radicales libres y prevendrán el envejecimiento prematuro. También sobresale por su bajo aporte calórico, y es que 100 gramos del alimento tan solo nos proporcionarán 17 calorías, por lo que es una gran opción para añadir a las dietas de las personas que estén buscando adelgazar.

La fibra que contiene justifica todavía más que quienes busquen adelgazar lo ingieran con regularidad. Este aspecto, junto a otras propiedades del alimento, como la rutina que contiene, un flavonoide, también influye a que la fruta ayude a reducir los índices de colesterol malo.

Así puedes añadir el calabacín a tu dieta

Este alimento puede usarse en una gran variedad de platos. En la época en la que nos encontramos seguramente lo que más apetezca sea tomar el calabacín en una crema caliente, perfecta para una cena rica y nutritiva. Además de la fruta, como apuntan desde Directo al Paladar, necesitaremos una patata, media cebolla, caldo de verduras, nata líquida, aceite de oliva virgen extra, pimienta y sal.

Con el calabacín también podríamos preparar una tortilla, a la que podemos añadir un poco de cebolla para hacerla más jugosa. Otra interesante idea es utilizarlo para una ensalada, como la que se puede leer en Divina Cocina, que también contiene zanahoria, queso, unas hojas de albahaca y el aliño realizado con aceite de oliva virgen extra, vinagre de manzana, sal y pimienta.