El fallo de la Audiencia no sólo afecta directamente a Lopera, sino que aclara que la juez actuó ajustándose a derecho cuando no incorporó a Luis Oliver, como fue su pretensión, a la causa.

"La compraventa de acciones realizada entre Farusa y Bitton Sport se realizó sin haber obtenido la autorización previa del CSD, lo que se prentendió salvar en el contrato sometiendo a la misma a la condición suspensiva de obtener la citada autorización [...]. En todo caso, la falta de cumplimiento de esta condición supone que el contrato no ha desplegado sus efectos, por lo que Farusa continúa siendo la titular de las acciones, de manera que Bitton Sport, no es ni puede ser parte en esta causa", señala el fallo de la Audiencia, que más adelante incluso analiza la prohibición de la venta de todas las acciones y no sólo de las 20.662 cuya titularidad por Farusa se cuestiona: "Las conclusiones policiales (se resume la investigación de la Guardia Civil ordenada por Alaya) no vienen sino a aportar indicios de lo que en auto resolviendo el recurso de reforma de 7 de septiembre de 2010, se afirma que era pública y notoria la sospecha que la operación de venta podía ser simulada y que la alargada figura de Lopera pudiera estar detrás del comprador. Y constituyen un motivo más que justifica la prohibición de venta de las acciones se extienda a todo el paquete".

Incluso la Audiencia en su fallo asegura que el hecho de que en auto de 26 de febrero de 2010 se dejase sin efecto la ampliación de la investigacióna las presuntas irregularidades por parte de Farusa en la suscripción y desembolso de 30.869 acciones en 1993 permita "tener inmunidad frente a cualquier actuación delictiva que eventualmente pueda realizar con la venta de las acciones en supuestos y circunstancias distintos a los que fueron analizados por las resoluciones de esta Sala.