"Enfrentarme con Unicaja me motiva de forma especial"

Bético confeso y con ascendencia y familia sevillanas, Guille Rubio es de Tarrasa. Gran parte de su carrera deportiva la pasó en Manresa, donde se le conocía como Guillem, pero en cuanto tuvo la oportunidad de acercarse a sus raíces no lo pensó. Pero los dos años en los que jugó en Unicaja no fueron lo que esperaba, después de ser en Manresa un puntal junto a Rafa Martínez. Este verano salió de Málaga, no demasiado bien, para afrontar un nuevo reto en el Banca Cívica, por lo que el duelo de cuartos de final ante su ex equipo es un encuentro "especial" para el ala-pívot, que tiene cuentas por resolver.

-Su primera Copa del Rey y debuta ante Unicaja. ¿Motivado?

-Es un partido especial para mí, por haber jugado en Málaga y salir de la forma en la que lo hice. Además, después de dos años allí sin jugar la Copa, ahora debuto en esta competición con el Banca Cívica. Pero debe ser un encuentro importante para todos porque, si queremos soñar y convertirnos en un equipo grande, hay que hacer cosas grandes.

-¿Lo del Madrid está olvidado?

-Tenemos que hacer borrón y cuenta nueva del último partido y sacar nuestro orgullo para mirar hacia delante.

-En diciembre, en el partido de Liga estuvieron cerca de ganar. ¿Sirve como referencia ahora?

-En el partido de Liga estuvimos mucho tiempo por delante en el marcador y pudimos ganar, pero en los últimos cinco minutos tiramos el partido. Esperamos un partido igualado, con pocas diferencias. Si queremos ganar, hay que estar concentrados los 40 minutos y no dejarlos escapar vivos como hicimos en Sevilla. El partido de Liga en San Pablo puede servirnos de referencia, tanto de lo que hay que hacer, en los primeros 30 minutos, como de lo que no hay que hacer, como los últimos cinco.

-Los minutos finales han condenado al Banca Cívica en muchos partidos este año. ¿Por qué?

-La verdad es que no hay un motivo que explique por qué perdemos tantos partidos al final. Es cierto que son ya muchos, pero tampoco hay que buscar excusas. Quizá pensamos que está hecho antes de tiempo y después nos cuesta ir contracorriente. Por eso digo que hay que estar concentrados del principio al último segundo.

-Seguramente le toque de nuevo bailar con la más fea: Freeland. ¿Han preparado algo específico?

-No estamos haciendo nada especial para frenarlo. Hay que poner en defensa la intensidad que él pone en ataque. Es un jugador que puede hacer de todo y este verano ha mejorado su tiro exterior. Es de los mejores pívots de Europa.

-Pero en el duelo de ACB la clave fue Valters.

-Sólo con Freeland no podrían andar por Europa como lo hacen. El juego de Unicaja se basa en él, pero tiene otros grandes jugadores y en cualquier momento aparece gente como Valters o Fitch para decidir.

-¿Cuál es la clave para ganar?

-Hay que controlar el balance defensivo, porque es un equipo al que le gusta correr, atar en corto a su gente alta en el poste bajo y estar atentos a los bloqueos.

-Unicaja es favorito, pero dicen que éste es un torneo especial...

-La Copa es especial y puede pasar cualquier cosa. No es como la Liga, en la que manda la regularidad. Hay que estar bien tres días y eso te puede valer un título. Ya ganamos, por ejemplo, al Barcelona en San Pablo. Si el equipo está concentrado y juega como lo sabe hacer, puede soñar.