Tras el felicísimo debut de Higuaín en el Juventus Stadium, con dos goles ante el Sassuolo en el triunfo por 3-1, el equipo de Massimiliano Allegri se apresta a seguir haciendo historia en su fortín alpino. El debut en una nueva edición de la Champions es muy esperado en Turín, donde el conjunto bianconero se muestra casi invulnerable en las citas europeas. Concretamente, acumula 17 partidos sin perder en casa en competiciones continentales. La última derrota data de abril de 2013, ante otro gigante como el Bayern (0-2).

Muy bien reforzado el equipo de Allegri con gente que tiene muchísimas muescas en el Viejo Continente como Daniel Alves, Higuaín, Pjanic o Benatia, la maduración de un equipo que cuenta con la retaguardia de la selección italiana se evidencia en la esperable ascensión de Dybala, un peligro latente para el ofensivo sistema de Sampaoli. El juego al espacio y el gol de Higuaín le ponen la guinda perfecta a la todopoderosa Vecchia Signora, embebida completamente en la Champions tras perder la final hace dos años ante el Barça.

Sucede además que el campeón italiano del último lustro es casi intratable para los equipos españoles en su feudo. De 23 visitas en partidos europeos, 14 veces se quedó la Juventus con la victoria, hubo siete empates y sólo contemplaron los aficionados locales dos derrotas, ante el Madrid en 1962 (0-1, gol de Di Stéfano) y ante el Deportivo en 2004 (0-1, Pandiani). Ya fuera en los viejos Comunale o Delle Alpi o en el nuevo estadio de tan grato recuerdo para los sevillistas, la Juve se hace muy fuerte. El Real Madrid, por ejemplo, ha perdido allí nada menos que seis veces, empató una vez y sólo ganó la referida ocasión, hace más de medio siglo. El reto es dificilísimo.