Markus Steinhöfer se está convirtiendo en una de las sensaciones de la pretemporada del Betis. La secretaría técnica, siempre muy atenta y conocedora del mercado, no dudó en firmar al lateral del Basilea, que había quedado libre y era uno de los futbolistas con más novias en el mercado. Y desde el primer momento, el nuevo jugador del cuadro verdiblanco ha sorprendido por su velocidad, de ahí que surja la cuestión de si es competencia para Chica o para Juanfran, pues en los partidos que ha disputado con el Betis en pretemporada (Coria, Braga, Huddersfield, Bolton y Wolverhampton) ha demostrado ser un lateral muy ofensivo, con continuas subidas, de ahí que incluso Mel lo haya probado por delante de Chica, en lugar de Juanfran, en alguno de estos partidos, como por ejemplo ante el Braga.

Steinhöfer atesora mucha potencia y capacidad de recuperación física para sorprender a las defensas rivales con sus penetraciones por la banda derecha, con buenos centros al corazón del área. Y es que el alemán tiene un buen golpeo de balón, algo de lo que Jorge Molina y Braian Rodríguez están llamados a aprovechar a lo largo de la temporada.

Con Steinhöfer, Mel ha visto que tiene un lateral polivalente, y que en muchos momentos del curso podría usarlo como extremo, aunque como lateral, al ser muy veloz, se convierte en un jugador muy pegadizo a la hora de que el rival intente desbordarlo en carrera.

Además, otro aspecto a destacar es que la adaptación de Markus -sus compañeros prefieren llamarlo por su nombre- al equipo está siendo fácil. El jugador ya dejó claro en su presentación que en cuento llegue a Sevilla buscará un profesor para aprender español lo antes posible, pero mientras tanto se apoya en algunos compañeros para que su integración no le suponga un inconveniente en su proceso de adaptación.

Es aquí donde surge la figura de Perquis, que está actuando de anfitrión con el teutón. El internacional polaco, que domina perfectamente el inglés, ha congeniado muy bien con Steinhöfer, que con el paso de los días se está convirtiendo en uno más dentro de la plantilla, pudiendo comprobar el buen ambiente que reina en el vestuario.