Playa y montaña, pero para trabajar. Javi Navarro está teniendo unas vacaciones a su manera, pues se ha trasladado a la costa de Cádiza, una zona que conoce perfectamente, para continuar con su largo y pesado proceso de recuperación. Su única obsesión es llegar a tiempo a la pretemporada para ponerse a las órdenes de Manolo Jiménez como uno más, una meta que está convencido de lograr a base de trabajo. Y para aumentar esa carga de trabajo ha elegido las enormes prestaciones naturales de la costa y la sierra de Cádiz, en la zona cercana al Estrecho de Gibraltar -es un asiduo de Tarifa-, para reforzar su rodilla derecha.

Javi Navarro está acompañado por el recuperador sevillista Sergio Domínguez, su alter ego en este largo periodo de recuperación desde que, en Cádiz capital, estuviera varios meses a las órdenes de otro recuperador de prestigio, Lorenzo Buenaventura.

Con Sergio Domínguez, el capitán sevillista ya comenzó a tocar balón al final de la temporada concluida, para ir teniendo sensaciones sobre cómo iba respondiendo su rodilla. Pero ahora está acentuando el trabajo físico, con sesiones de fisioterapia, en su empeño de volver a estar al cien por ciento de su capacidad.