Un ascenso temprano, quizá raro y sin Emana

El Betis se ha escapado. Aunque el Rayo le pisa los talones igualado a puntos, la distancia sobre el tercer clasificado, el Celta, que es la que de verdad interesa, se ha disparado hasta los 11 puntos, que en el caso de los verdiblancos casi puede considerarse uno más. Y es que, igualado el goal average particular, en el general la diferencia de goles del Betis es de 38 a su favor, mientras que en los vigueses es sólo de 21. Es decir, que para que éstos los adelantasen en la clasificación deberían enjugar los puntos que separan a ambos y un buen número de goles.

En cualquier caso, al ser esta última distancia salvable, a la hora de acudir a las matemáticas, hay que ser estrictos y rigurosos. Con todo, la primera fecha de ascenso posible para los verdiblancos se daría dentro de dos jornadas, es decir, en la 38, a falta de cuatro -récord en la historia del Betis-, cuando recibirá el próximo miércoles (22:00) en Heliópolis al Tenerife.

En este caso, se produciría, no obstante, una circunstancia un tanto extraña y que afearía el logro, toda vez que el Celta no disputa su partido, en su caso frente al Salamanca en el estadio Helmántico, hasta el día siguiente, el jueves 12 de mayo (22:00). Es decir, que el Betis podría ascender sin estar disputando un partido en ese momento, ya que no es hasta a falta de dos jornadas cuando la Liga unifica los horarios.

Para que el Betis ascendiese en esta jornada debería aventajar al Celta en más de 12 puntos, requisito que cumpliría si gana el próximo domingo en Córdoba y, lógicamente, lo hace frente al Tenerife y los vigueses no logran el pleno en alguno de sus dos siguientes compromisos, en casa frente al Girona, o el referido de Salamanca. Evidentemente, si el pinchazo celeste se produjese esta semana, el Betis no debería esperar a ver qué hace su rival el jueves en la ribera del Tormes. Incluso, el Betis podría ascender empatando sus dos próximos partidos si el Celta perdiese los suyos, ya que lo aventajaría también en 13 puntos.

A partir de esa fecha, el ascenso bético comienza a ser cada vez más factible, toda vez que en Tarragona necesitará sólo 10 puntos de ventaja, uno menos de la que hoy goza, y así sucesivamente. Aunque no parece que el festejo se prorrogue más allá de la jornada 40, en la que se mide en Heliópolis al Huesca y de la que debería salir con 7 puntos de margen sobre el tercero.

Pero no todo son buenas noticias en el Betis, ya que ayer se confirmó que Emana deberá pasar por el quirófano y permanecerá entre tres y cuatro semanas de baja, por lo que difícilmente participará de forma activa en el ascenso de categoría, ya que llegaría al último partido ante el Villarreal B.

El futbolista camerunés, que sufrió un fuerte choque con el ex verdiblanco Sunny, cabeza con cabeza, quedó ingresado el sábado en el Hospital Universitario Virgen del Rocío. A Emana le fue diagnosticada "una fractura de la lámina papirácea derecha, pequeñas líneas de fractura en el techo de la órbita izquierda y fractura de los huesos propios de la nariz", según reza el parte médico insertado en la web del club.

Entre mañana y pasado, el jugador será nuevamente valorado por los médicos y se decidirá el día de su intervención quirúrgica, que se llevará a cabo, presumiblemente, en el mismo hospital.

El atacante africano se encuentra desde ayer descansando en su domicilio, con un tratamiento para mitigar el dolor y, mediada la tarde, recibió la llamada telefónica de quien fuese compañero suyo la temporada anterior, el nigeriano Sunny, causante involuntario de su lesión.

El centrocampista numantino, algo aturdido también por el fuerte golpe sufrido, explicó que se puso en contacto con él en cuanto le informaron de la gravedad de su lesión y pudo contactar.

"Yo me encuentro algo mejor, pero apenado por Achille. Es una lástima lo que le ha ocurrido, sobre todo que tenga que ser operado. Por eso he estado hablando con él para darle ánimos", comentaba a este diario minutos después el nigeriano.

"Fue una jugada sin querer y siento mucho lo que le ha pasado", repetía el nigeriano, que hizo buenas migas con otro africano como Emana. "Yo no me llevo mal con nadie, y menos con un compañero. Pero, precisamente, con Achille es con quien tuve más trato en el Betis, incluso fuimos a algunos sitios juntos durante mi estancia en Sevilla. Le he pedido perdón por ser el causante del choque sufrido y le deseo que pueda disfrutar del ascenso con el Betis", añadió Sunny.