Cuando el orgullo no esconde los defectos

Aseguró Gabriel Calderón en su primer día como entrenador del Betis que una de las claves futbolísticas para cambiar la dinámica de resultados pasaba por mejorar el rendimiento defensivo del equipo. Ni 20 minutos decentes, con las líneas juntas y una presión más o menos coordinada sirvió para enderezar a este Betis, que se desmoronó al primer soplido como un castillo de naipes. Le bastaron al Celta tres centros al área para remontar y sentenciar al encuentro, ante la fragilidad defensiva de su rival.

En lo anímico, Calderón pidió a sus jugadores que tirasen de orgullo. Y sí, el Betis se intentó fajar, pero si Verdú, Salva Sevilla o los delanteros no están preparados para correr detrás de la pelota, de poco vale la actitud. La voluntad por hacer las cosas correctamente no escondió los defectos de una plantilla mal confeccionada, por más que algunos expertos como Bosch -¡qué daño ha provocado y qué de aplausos inmerecidos se llevó!- la colocasen entre las diez mejores de la Liga.

Defensa

Compareció el equipo verdiblanco con personalidad y la zaga adelantó líneas para juntarse al mediocampo en la presión cuando la situación lo requería. Todo se derrumbó con los errores individuales, con pérdidas absurdas como la del primer gol, con el pasillo que se le generó a Nacho ante la falta de ayudas y su mal momento, o los erróneos despejes de Juanfran, que sí ofrece sus mejores prestaciones en ataque, pero que atrás concede siempre a a los contrarios.

Ataque

Alternó el cuadro verdiblanco la búsqueda del contragolpe con el control del balón y eso le sirvió para generar más ocasiones que encuentros precedentes. La movilidad de Leo Baptistao, las incorporaciones de Juanfran aprovechando los espacios que generó su compañero y la mejor versión del goleador Rubén Castro de los últimos tiempos animaron el juego ofensivo bético.

Virtudes

La carta de presentación, que duró 20 minutos; y la mejoría de Rubén Castro.

Talón de Aquiles

Los rivales le hacen goles con apenas lanzar balones al área. Acaba pagando la falta de físico en la media y atrás.

Uno por uno

Sara No hace paradas de mérito desde hace mucho.

Juanfran Cuando ataca ofrece sus mejores prestaciones, pero sus despejes cuestan goles.

Paulao No marca dentro del área y eso es imperdonable.

Amaya Voluntad, pero desacertado.

Nacho No recibió ayudas por su lado y Hugo Mallo y Rafinha le dieron la noche.

Reyes El único con una mentalidad defensiva y con capacidad para robar, pero también acabó superado.

Nono Juega más por las deficiencias de otros que por los méritos acumulados en los últimos partidos.

Salva Sevilla Su físico es muy frágil y más para jugar desde la banda. No ayudó a Nacho, pero al menos tiró de orgullo para combinar.

Verdú Calderón lo está intentando recuperar, pero su fútbol actual no se corresponde a la élite.

Baptistao Desborde pero siempre lejos del área.

Rubén Castro Animado, metió dos y rozó otro. La única noticia positiva para Calderón.

Jordi Entró por el lesionado Paulao ya con 3-1 y apenas intervino en el juego.

Jorge Molina Con los cambios se colocó junto a Rubén, pero no remató y casi que no combinó.

Cedrick Una entrada alevosa a Rafinha que le costó la roja y nada más.