¿Comenzamos de nuevo? Éste es el lema de la nueva campaña de abonos y ésta es la pregunta que el Sevilla les hace a sus aficionados en su reto de realizar una revolución total para recuperar las señas de identidad del equipo de los albores del siglo XXI, las mismas señas que pusieron las simientes para una etapa gloriosa que ya está bien guardada en los arcanos de Nervión. Humildad, autenticidad, unidad... Toda una serie de conceptos abstractos están detrás del nuevo programa del club nervionense para realizar este reinicio. Pero, ¿bastará esta vuelta a los orígenes para enganchar al sevillismo, a un sevillismo desencantado y crítico incluso con las rebajas de los carnés? A eso se apresta José María del Nido, que promete ilusión, una plantilla muy mejorada y unos fichajes que colmarán las expectativas más halagüeñas.

Es la promesa del presidente, el hombre que mejor sabe cómo va la planificación. Hará falta algo más que humo ante el desencanto de un sevillismo que no asume bien eso de ir a Europa como noveno y que, por ahora, sólo recibe noticias en forma de ventas o negociaciones de sus grandes estrellas, Jesús Navas y Negredo. Ante esta incertidumbre o incluso inquietud, "tranquilidad e ilusión". "Estoy tan ilusionado con los hombres y nombres para configurar la plantilla, en la que al menos habrá cinco incorporaciones, y posiblemente más, que el plantel va a ser lo suficientemente atractivo y va a tener la suficiente calidad para que no se vaya ningún socio de los que ya están y vuelvan los que se fueron en su día", dijo un Del Nido sorprendentemente motivado. 

La promesa fue al presentar la campaña de abonos: "La idea es bajar ostensiblemente los precios en todas las zonas, para intentar que el estadio vuelva a ser visitado por los sevillistas, que el estadio Ramón Sánchez-Pizjuán esté lleno y que el rival se sienta incómodo. Lo que no sea llegar a los 30 ó 35.000 socios, sería considerado un fracaso porque con esta bajada de precios sin esas cifras la pérdida en el capítulo de ingresos sería considerable. Pero soy optimista y estoy seguro que se va a conseguir", añadió el dirigente, que prevé "una plantilla que será mejor que la del año pasado". 

Del Nido dejó caer que a partir del 30 de junio, con el cambio de ejercicio económico, pueden empezar a caer los refuerzos en cascada. Muchas operaciones están avanzadas y el club, por intereses presupuestarios y por la negociación por Negredo, las ralentiza. "¿Comenzamos de nuevo? Es un lema que yo afirmo, sin interrogantes. Esperemos que este proyecto deportivo satisfaga a nuestros aficionados, que los colme de ilusión porque estoy convencido que esta ilusión que tiene el presidente, se trasladará en los próximos días con las incorporaciones que va a haber, que al menos serán cinco, y próximamente más. Recuperamos nuestros orígenes y buscamos de nuevo el hambre, la juventud, la experiencia y la ilusión de aquel equipo de la 03-04, iniciamos de nuevo un camino a tres años vista y que pretende que los sevillistas se sientan orgullosos siempre del equipo, más cuando pierda que cuando gane", dijo.