En el Betis se trabaja con denuedo por dar con los responsables de los cánticos machistas, pero, aun así, nadie esconde el temor a una dura sanción, máxime cuando los máximos organismos deportivos y gubernamentales llevan tiempo buscando un conejillo de indias para imponerle una sanción ejemplar en la labor emprendida, tras la muerte de un aficionado del Deportivo en el Manzanares, para exterminar a los violentos del fútbol.

Sin lugar a dudas, aunque desde entonces ha habido peleas, roturas de lunas de autocares y un sinfín de incidentes, los cánticos contra la ex novia de Rubén Castro han sido los más graves que se han escuchado y, encima, han enervado, unánimemente, a un sinfín de colectivos.

Con todo, las peores noticias para el club llegaron este martes, cuando en sus oficinas se tuvo conocimiento de que la Liga de Fútbol Profesional (LFP), el Consejo Superior de Deportes (CSD) y hasta la propia Fiscalía de Sevilla habían terciado en el asunto. Así, ya nadie duda de que la sanción al club y a los responsables, si son identificados, será de aúpa.

Amparo Díaz, la abogada de Laura Pavón, la joven insultada, ya manifestó que "lo ideal sería que la Fiscalía de Sevilla denunciara de oficio" y ésta apenas tardó en iniciar los primeros trámites encaminados a ello. Así, a mediodía se conoció que el Ministerio Público, que pide dos años y un mes de cárcel para Rubén Castro, víctima adyacente de estos cánticos, había decidido abrir de oficio unas diligencias de investigación. Fue la propia fiscal jefe de Sevilla, María José Segarra, la que tomó la decisión después de que ninguna institución haya interpuesto denuncia alguna al respecto a la fecha.

El cántico le va a salir caro al Betis, pese a que el mismo lunes mostrara su "repugnancia" y se comprometiese, como está haciendo, a tratar de identificar a los responsables y que el peso de la ley caiga sobre ellos, amén de cualquier medida interna que pudiese tomar el propio club y que conllevaría, según sus estatutos, la expulsión inmediata de los culpables.

Según la ley, los autores de los cánticos podrían ser sancionados con multas individuales de hasta 60.000 euros y la prohibición de acceso a recintos deportivos por un plazo máximo de dos años. Además, se les podría imponer la sanción de realizar trabajos en favor de la comunidad. Así consta en el articulado de la Ley Contra la Violencia en el Deporte que, desde 2007, regula este tipo de conductas tanto en los estadios como en sus aledaños con multas que pueden ascender hasta los 650.000 euros en las infracciones calificadas como muy graves. Con todo, lo más preocupante es la sanción al club, con el cierre temporal de la grada de Gol Sur como medida previsible.

La tercera en salir a la palestra fue la directora general de Violencia de Género y Asistencia a Víctimas de la Junta de Andalucía, Encarnación Aguilar, que mostró su apoyo a la investigación abierta por la Fiscalía.

En un comunicado de prensa, Aguilar denunció "la doble victimización que supone para esta mujer los insultos degradantes y humillantes recibidos en un evento público y que se suman al sufrimiento por los presuntos malos tratos recibidos y al calvario por el proceso judicial que está soportando la víctima".

La responsable andaluza en materia de violencia de género abogó por erradicar las conductas machistas en el mundo del deporte y que suponen un obstáculo más para avanzar en la lucha por la igualdad plena de las mujeres. "Estos hechos ponen de relieve el sentimiento y pensamiento machista que existe desgraciadamente todavía en parte de la sociedad, con una especial preocupación en este caso porque muchos de los autores de los cánticos son jóvenes", dijo la directora de Violencia de Género, que alabó la reacción del club verdiblanco condenando los hechos, aunque lanzó una puya a Rubén Castro, que no ha sido ni juzgado, al decir que "las personas que son líderes o referentes sociales deben ser ejemplares en su comportamiento para proyectar entre sus seguidores valores que contribuyan a construir una sociedad mejor y en la que prime la igualdad entre hombres y mujeres".

Paralelamente, en el mundo del deporte también hubo reacciones. Así, la LFP denunció los cánticos ante el Comité de Competición de la Federación Española de Fútbol (FEF). La denuncia, para su traslado a la Comisión Antiviolencia, refleja que en el minuto 83 del partido, cuando el jugador se retiraba del campo al ser sustituido, se entonó un cántico que decía "Rubén Castro alé, Rubén Castro alé, no fue tu culpa, era una puta, lo hiciste bien", en referencia al procedimiento judicial abierto.

Los cánticos se entonaron desde la grada de Gol Sur por parte de un número indeterminado pero relevante de unos mil espectadores, según la LFP. La denuncia también reseña que "el cántico fue entonado de forma repetida, coral y coordinada únicamente por parte del referido grupo" y que coincide con el realizado en los minutos previos al partido Betis-Ponferradina, el 8 de febrero.

La LFP sí recuerda que desde ese día el Betis puso en marcha una iniciativa para evitar que los aficionados accedan a su estadio con bufandas que contengan lemas que inciten a la violencia, xenofobia, racismo o contra el respeto en el fútbol y destacó que tanto en las redes sociales como en su página web oficial el club apeló a la erradicación de mensajes ofensivos en los campos de fútbol a través del lema propuesto por la LFP Afición+Respeto=Vive el fútbol.

Para rizar el rizo, el presidente del CSD, Miguel Cardenal, dijo que los cánticos "son impresentables y por supuesto que tendrán su análisis, reprobación y castigo en la Comisión Antiviolencia".

"Actitudes machistas como las exhibidas por un grupo de exaltados que no representa a la afición del Betis no pueden ser pasadas por alto y deben tener sanción. La sociedad y nuestro deporte no pueden permitir cánticos incivilizados", añadió.