Dos Hermanas

Alunizaje en una tienda de telefonía móvil en Montequinto

  • Los ladrones empotraron un coche robado contra el escaparate y lograron huir con un número indeterminado de aparatos 

La tienda de telefonía de Montequinto donde ha tenido lugar el robo.

La tienda de telefonía de Montequinto donde ha tenido lugar el robo. / Juan Carlos Vázquez

Unos delincuentes empotraron ayer un Seat Ibiza contra una tienda de telefonía móvil de la empresa Orange en Montequinto (Dos Hermanas). El alunizaje ocurrió de madrugada en un establecimiento de la calle Messina en la que los ladrones accedieron tras destrozar la reja metálica y el escaparate y de donde sustrajeron un número indeterminado de teléfonos móviles que estaban expuestos en el comercio.

La Policía Nacional ha abierto una investigación sobre el robo a través de la toma de huellas y restos biológicos que ayuden a identificar a los autores y está a la espera de la presentación del parte de denuncia del propietario para poder determinar la cuantía de los daños y la mercancía sustraída.

Los delincuentes huyeron del lugar en otro vehículo diferente al utilizado para el alunizaje, que fue abandonado en el lugar, ambos robados.

Es el segundo alunizaje que tiene lugar en la provincia en menos de un mes. El pasado 12 de agosto una banda de aluniceros asaltaron la joyería Orocaja en la calle Sinaí de la capital, en Nervión, en la que causaron grandes destrozos. Al igual que ahora, el alunizaje tuvo lugar de madrugada. Los delincuentes arrancaron la persiana de seguridad del local e introdujeron el vehículo en el interior del mismo, destrozando buena parte del mobiliario. 

El alunizaje es uno de los métodos preferidos por los ladrones especializados en el robo con fuerza en comercios. En Sevilla han operado hasta diez bandas en el mismo momento, si bien la presión policial ha ido reduciendo estos delitos en los últimos meses. Este verano estaba siendo especialmente tranquilo, a diferencia de años anteriores, cuando los alunizajes se producían casi a diario.

Ópticas, perfumerías y tiendas de telefonía móvil han sido los negocios más perjudicados por la actividad de los aluniceros en los últimos años en Sevilla.

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